Tan solo un “fenómeno mediático de Capital Federal”. Alguien que genera “repulsión ideológica por su visión del Estado”. Un dirigente que algunos califican, en contraste, como “un capo”. También, la posible tabla de salvación para un partido con ideas liberales que enfrentará un duro desafío electoral en 2023.
Muchas y diversas reacciones produce Javier Milei, el libertario que quiere ser presidente del país el año que viene y que en los próximos días llegará a Mendoza para tratar de impregnar aquí su mensaje contra la “casta política” y sus ideas para una futura gestión.
Milei dará una conferencia el viernes que viene en la sede capitalina del Partido Demócrata y una charla pública, o “clase”, al otro día, en Parque O’ Higgins. La disertación ha sido titulada “Dolarización”, una de las ideas rupturistas con las que machaca en su anticipada campaña.
Lo traen a la provincia, lógicamente, quienes más lo necesitan: los demócratas. Después de unas cuantas diásporas y malas elecciones, el PD se ha quedado con una sola representante en la Legislatura, quien finaliza su mandato el año que viene: Mercedes Mechi Llano.
Subirse ya a la “ola Milei” parece que será la estrategia ante semejante contingencia. “Es la línea liberal histórica que ha tenido el PD”, se defiende Roberto Ajo, presidente actual del partido. Los demócratas están listos, además, para proveer a Milei del sello necesario para competir en las presidenciales del año que viene, si así lo dispone.
Sus líderes históricos, Carlos Balter y Gabriel Llano, lo vienen impulsando en el marco del Partido Demócrata Nacional, que tiene como presidente, precisamente, a Balter. El PDN tiene personería jurídica y presencia en varias provincias. “Es la opción más viable para Milei”, ofrecen sin tapujos los demócratas que lo siguen.
Pero el discurso de Milei consigue buenas recepciones también entre algunas figuras del oficialismo mendocino, como Omar de Marchi, que reconoce tener “una buena relación” con el economista liberal. De Marchi, cauteloso en este caso por su pertenencia a otro sector político, no se mostrará con Milei durante su visita a Mendoza, pero resulta que sus lazos con los mendocinos que lo impulsan son más que evidentes.
Sin ir más lejos, el presidente demócrata Ajo, uno de los principales promotores de Milei en Mendoza, es el secretario del Concejo Deliberante de Luján, departamento que es gobernado por el pupilo de De Marchi, Sebastián Bragagnolo.
Más allá de las conexiones indirectas y la buena onda con disimulos en el PRO, el frente Cambia Mendoza tiene al menos un dirigente que ya se acercó a Milei, sin esconderlo ni mucho menos. Se trata del diputado José María Videla Sáenz, un líbero del frente oficialista que buscó la forma de llegar y se sacó una foto con él esta semana.
Videla Sáenz, ladero del fallecido ex legislador y sindicalista Guillermo Pereyra y hombre de la porción del Frente Renovador que abandonó a Sergio Massa cuando se incorporó al kirchnerismo, se deshizo en elogios hacia Milei después de la experiencia. “Tiene ideas muy buenas, como la reforma del Banco Central para frenar la emisión; y la dolarización, que daría estabilidad y evitaría la inflación”, destacó el legislador oficialista.
El diputado hizo su propio camino para llegar a Milei. Logró tomar contacto con una hermana suya y consiguió una audiencia. Cuando tuvo listo el encuentro, “avisó” a los radicales que lideran Cambia Mendoza. “Avisó, pero no lo consensuó”, aclara por los dudas a Los Andes Andrés Peti Lombardi, el radical que preside la Cámara de Diputados.
Hay algo más que decir respecto de este encuentro. Videla Sáenz es otro dirigente mendocino con sello partidario propio. Preside a nivel nacional el Partido Renovador Federal, que tiene ideas de centro-derecha y en el cual militan o militaron dirigentes allegados a María Eugenia Vidal y el radical jujeño Gerardo Morales.
FRÍA Y HOSTIL RECEPCIÓN RADICAL
En contraste a todo lo anterior, el radicalismo mendocino es el que muestra más frialdad ante el desembarco en la provincia del economista que lidera “La Libertad Avanza” . No habría ningún gesto radical durante su estadía en Mendoza y sus principales figuras aseguran que ni siquiera se conversó al respecto de esta venida en las roscas frecuentes de la UCR.
La recepción oficialista, más que fría, es casi hostil. Un estudio de la encuestadora Reale Dalla Torre que surge a pocos días de su llegada a Mendoza expone a Milei como un dirigente con números bastante malos respecto de su credibilidad en la provincia.
Según la encuesta, el 73,2% de los mendocinos “no le cree” a Milei. Este nivel de rechazo es mucho más alto que el que tienen en la provincia los líderes locales del radicalismo, Rodolfo Suárez (42,5%) y Alfredo Cornejo (43,2%). Ellos tienen más gente que “les cree” que población que no lo hace.
La encuesta lo muestra, en realidad, mucho más cerca de los números de rechazo obtenidos en el estudio por las figuras kirchneristas relevadas: Anabel Fernández Sagasti (73,3%), Alberto Fernández (74,5%) y Cristina Kirchner (77%). Aunque hay que decir que el más rechazado de todos es Mauricio Macri (80,5%) y la encuesta tampoco ubica bien a Patricia Bullrich (72,3%).
Hay un tiro por elevación también para De Marchi, que tiene un rechazo de 58,2%, apenas un poco mejor que Horacio Rodríguez Larreta (56,2%).
En lo que respecta al libertario, en promedio, uno de cada cuatro mendocinos le cree. Segmentado este número, refleja la encuesta un dato predecible: tiene su mejor desempeño en el rango etario que va de los 18 a los 30 años, con 28,4%.
Martha Reale señala que Milei consigue estos números bastante magros porque “nadie puede creerle a quien no conoce”. El libertario es, a su juicio, un dirigente que “no termina de posicionarse en toda la sociedad como líder”.
Reale lo califica como un “emergente disruptivo”, un catalizador de la bronca que “pesca” entre los desencantados del Frente de Todos, más que nada, y en el público joven. Sin embargo, aunque no haya números a la vista por el momento, asegura que los intendentes mendocinos tienen mejor nivel de credibilidad que él, ya que la gente está al tanto de sus gestiones.
Lapidaria, la encuestadora lo asemeja con José Luis Ramón, el creador de Protectora que, tras una irrupción electoral sorprendente en 2017, que lo colocó como tercera fuerza en Mendoza, se diluyó y comenzó a caer.
LA CRISIS, FACTOR DE RIESGO PARA EL FRENTE DE TODOS Y JUNTOS
“Tiene buena imagen, en la UCR le tienen más miedo que otra cosa”, reaccionó con sorna un dirigente del PRO ante las cifras del presunto rechazo social que genera Javier Milei en Mendoza.
Los que se arriman a Milei con precaución para no quemarse consideran también que nadie puede especular aún sobre la intención de voto que podría tener en 2023.
En este sentido, el peronismo mendocino es el que más repele desde los ideológico al libertario, por su discurso agresivo con la “casta” y el Estado. “Estamos en las antípodas suyas”.
Sin embargo, a la vez, los justicialistas tienen cierta esperanza de que su presunto rendimiento electoral aporte beneficios al PJ. “Nos saca el voto joven, pero les saca más a los otros”, aseguró a Los Andes un justicialista, a contramano de las consideraciones de la encuestadora de RdT.
Un dato estadístico sugiere que, como dice la gente del PRO, con Milei no estaría todo dicho. La encuesta de RdT muestra que la situación económica y la inflación preocupan nada menos que al 88% de la población mendocina.
Ante este panorama en el que la economía gana por robo en el ranking de desvelos ciudadanos, no se puede predecir mucho cuánto daño puede hacerle tanto al Frente de Todos como a Juntos por el Cambio un empeoramiento de la crisis.
Y cuánto puede capitalizar el personaje disruptivo de la política que llegará a Mendoza en pocos días.
