Los principales referentes y candidatos de Juntos por el Cambio (JpC) participaron de una cumbre presencial, en la que planteó el camino para tratar de repetir la victoria que lograron en las primarias frente al oficialista Frente de Todos y en la que también se apuntaron los objetivos de largo plazo, para pelea por las presidenciales de 2023.
Fue un encuentro para celebrar, para ponderar la unidad y para encaminar a la tropa hacia el desafío de elevar el caudal de votos que se obtuvo en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso).
Los encargados de enviar los mensajes fueron los titulares de los tres partidos que conforman el espacio, Alfredo Cornejo (Unión Cívica Radical), Patricia Bullrich (Propuesta Republicana) y Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica).
En el estrado del salón de eventos de un hotel ubicado a metros de la Plaza de Mayo, Cornejo, Bullrich y Ferraro se mostraron acompañados por el ex presidente Mauricio Macri; el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés; y los jefes de los bloques de JpC en Diputados, Mario Negri, y en el Senado, Luis Naidenoff.
El escenario se completó con la presencia de Martín Lousteau, Miguel Ángel Pichetto, María Eugenia Vidal y Jorge Macri, entre otros. Y en el salón estuvieron presentes los candidatos de todo el país que pelean por las bancas que se deberán renovar este año en el Congreso de la Nación.
“Enfrentamos al poder político en la Argentina representado en Alberto (Fernández) y Cristina (Kirchner) como dos grandes irresponsables. Irresponsables porque se unieron al solo efecto de conquistar el poder, sin tener un programa mínimo de coincidencias básicas. Tienen diferencias sustanciales quienes están en el Frente de Todos, en conceptos estructurales, no en matices como los que tenemos en JpC son beneficiosos”, contrastó Cornejo.
El diputado mendocino luego hizo alusión al escándalo que se desató en el oficialismo en los últimos días por las diferencias públicas entre el Presidente y la Vicepresidenta, y que forzaron cambios en el Gabinete nacional. “Esos dos irresponsables se mantuvieron unidos hasta el 12 de septiembre, hasta que vieron que el pueblo, última fuente de poder en cualquier democracia, les empezó a quitar el poder. Por eso empiezan las divisiones”, opinó.
El mendocino que conduce el radicalismo formalizó en su discurso el malestar y la preocupación de muchos de los dirigentes de JpC por el nuevo rumbo que emprendió el Gobierno que busca generar un shock de consumo para tratar de revertir el revés electoral. “¿Si era tan fácil sacar a nuestra gente de la pobreza por qué no lo hicieron antes? En menos de dos meses van a querer generar una nueva burbuja de consumo, que es ficticia, y que puede generar picos hiperinflacionarios en un corto plazo”, alertó.
Cornejo habló de una “gesta” y Patricia Bullrich repasó los objetivos, entre los que destacó la necesidad de reforzar la campaña en las ocho provincias en las que se eligen candidatos a senadores. La titular de PRO adelantó que iniciará una gira para acompañar a los postulantes en Córdoba, Catamarca, Chubut, Corrientes, La Pampa, Mendoza, Santa Fe y Tucumán.
“En estas ocho provincias tenemos la llave para lograr que el Senado no tenga más el quórum en manos de un oficialismo, que quiere elegir jueces o Consejo de la Magistratura a su antojo. En estas ocho provincias jugamos una llave de gobernabilidad importantísima, un cambio histórico, de carácter de gobernabilidad en nuestro país”, manifestó la ex ministra de Seguridad.
La referente del partido que fundó Mauricio Macri habló del “gabinete electoral” que se conformó en el Gobierno nacional. “Es un Gabinete de pesos pesados, de fuerza pesada, que viene a meternos en el barro, que viene a generar una elección repartiendo dinero, dádivas, como lo hemos visto lamentablemente en la provincia de Tucumán”, dijo para apuntar directamente al flamante jefe de Gabinete, Juan Manzur.
Bullrich estableció un objetivo más ambicioso para la coalición. Dijo que en las legislativas del 14 de noviembre se tienen que sacar el “45% de los votos”. “Eso nos pone en el 2023 sin balotaje a la presidencia de la Nación”, apostó. Y adelantó que JpC creará un Comité Jurídico Electoral para “denunciar delitos electorales, para que no se usen fondos públicos a favor del oficialismo y para que no se usen las bases de datos protegidos por la ley de datos personales, la base del IFE, de los planes sociales”.
“Cada uno de nosotros tiene que ser un enorme freno al uso de los fondos públicos porque eso es lo que van a hacer”, exigió.
Fue un encuentro en el que se escucharon felicitaciones cruzadas y en el que hubo gestos de distensión entre quienes protagonizaron las grandes internas de la coalición, como el macrista Diego Santilli y el radical Facundo Manes en la provincia de Buenos Aires.
Pero en los detalles se notaron las diferencias reinantes. Uno de ellos, fue cuando los referentes posaron para la “foto familiar” y, entusiasmado, Rodríguez Larreta gritó “hay equipo, hay equipo”. Sin embargo, desde el fondo, el intendente Jorge Macri se encargó de responderle al mandatario que ya se adentró en su carrera presidencial: “Primero equipo para el 2021, no perdamos el foco”.
Los referentes de JpC reconocen que el desafío es continuar con la ampliación del espacio, sobre todo en esta instancia en la que no protagonizarán las internas que le agregaron volumen a sus propuestas electorales. Pero las tareas a encarar no opacan el entusiasmo, tal como lo demostró Miguel Ángel Pichetto, quien abrazó al peronista Emilio Monzó y le dijo: “Empieza otra etapa Emilio”.