Frente a la confirmación de Alfredo Cornejo como candidato a gobernador por la UCR, la conducción del peronismo mendocino trató de marcar presencia con un anuncio y una advertencia.
El anuncio fue que se está por concretar el congreso partidario en el cual los justicialistas definirán el frente que liderará el PJ camino a las elecciones de este año. Por otro lado, la advertencia fue que ese frente tendrá un “límite idelógico”: ”Macri, Omar de Marchi y Cornejo”, señaló la presidenta del PJ, la comporista Flor Destéfanis en las redes sociales.
Tenía poca letra el resto de los dirigentes consultados para profundizar este mensaje. De todos modos, claramente se notó que buscaba neutralizar en pocas palabras los rumores sobre la posibilidad de que el frente opositor para competir con Cornejo incluya a su rival interno de Cambia Mendoza, De Marchi.
En dos tuits, Destéfanis delineó el panorama. “En pocos días nuestro partido hará un congreso para autorizar frentes y alianzas electorales. El justicialismo fue, es y será siempre frentista, y nuevamente lo haremos con todos los partidos y dirigentes que coincidan con nuestras banderas históricas”, decía el primero.
El segundo mencionaba directamente a los que no podrían participar del armado. “Nuestro límite es ideológico, de ahí nuestras diferencias con Macri, De Marchi y Cornejo”, recalcaba el segundo texto.
De Marchi apareció en la comunicación de la presidenta del PJ mendocino en medio de numerosos rumores respecto del alcance del frente que sellará el justicialismo y algunas fotos sugestivas que produjeron controversia.
El líder del PRO desató un encontronazo entre “compañeros” con una visita a San Rafael y la respectiva foto suya junto al intendente Emir Félix.
La Cámpora no tardó en cuestionar el encuentro vendimial entre De Marchi y Félix y la tropa del intendente sureño contestó con reproches al kirchnerismo local: “Expliquen porqué no recibieron a Alberto Fernández cuando vino, entre otras tantas cosas más”, lanzó el diputado Mauricio Sat.
El escenario de tensión interna se completó con palabras elogiosas y alguna caricia velada a De Marchi por parte los intendentes peronistas Matías Stevanato (Maipú) y Roberto Righi (Lavalle). Para ambos, así como para Félix, se aproxima el desafío electoral de las elecciones desdobladas en sus municipios.
El más lanzado a la hora de hablar sobre las posibilidades de integración con De Marchi ha sido hasta aquí Stevanato. Es el único de los tres que se juega la reelección (Félix y Righi no pueden competir otra vez en sus municipios) y el que más se anima a anticipar que el peronismo armará un “gran frente” para la competencia en las elecciones.
El intendente de Maipú es cercano al massismo, un sector que en Mendoza tampoco le hace la cruz al jefe del PRO. Para él, según dijo a Los Andes, De Marchi es “un gran dirigente, formado, que mostró gestión en Luján. Habla con muchas fuerzas y necesitamos dirigentes que aprovechen para escuchar más de lo que hablan”.
Sobre la resistencia que puede surgir en La Cámpora al “gran frente provincial”, Stevanato sostuvo: “Son charlas que hay que tener, hay que buscar puntos en común”.
“Hay muchas charlas y reuniones”, insisten, misteriosos, en el PJ.
Orden
En este contexto, salió Destéfanis a tratar de poner orden en el PJ. Más allá de que sus conceptos se relativicen frente a otras opiniones encontradas o por lo menos no tan tajantes respecto de las alianzas que tejerá el peronismo.
Lo único cierto es que, con los tuits de la presidenta partidaria, empezó a delinear La Cámpora cuál será el calendario para la toma de decisiones.
La cúpula partidaria aclaró que Destéfanis “no anunció ningún frente, si no el congreso partidario, que es una obligación legal que se tiene que concretar en los próximos días, durante febrero”.
“El congreso partidario autoriza la constitución de frentes o alianzas y le da el mandato a la presidenta, así como los lineamientos de cómo tiene que ser el frente”, agregó una fuente de la conducción del PJ.
Los tiempos apremian, ya que la fecha límite para que el frente electoral del PJ esté constituido es el 1 de marzo próximo. Este plazo rige para las elecciones desdobladas en los municipios, que se harán antes que las provinciales y que serán de impacto para el peronismo, ya que todos los intendentes de este partido desdoblaron.
La burocracia del PJ impone también que sea el Consejo partidario el que fije la fecha y convoque al Congreso. El Consejo se reuniría la semana que viene con este objetivo.
En el medio, una ausencia no menor podría demorar la fecha del congreso peronista. Se trata del intendente Félix, a quien La Cámpora se ha cansado de pedirle que sea candidato a gobernador del PJ en las próximas elecciones.
Félix se tomó licencia como intendente desde el 8 hasta el 20 de este mes y “hay que esperar que regrese”, advierten en el PJ. Lo hizo poco después de la Vendimia departamental y el encuentro con el líder del PRO que puso en tensión a todo el partido.