La Dirección General de Escuelas (DGE) decidió dejar sin efecto desde hoy el protocolo sanitario que se estableció por la pandemia del coronavirus. La medida salió publicada hoy en el Boletín Oficial, mediante la resolución 2.265 que firmó el director General de Escuelas, José Thomas.
Según establece en los considerandos de la norma, el 17 de febrero de este año se aprobó el Protocolo Sanitario para el desarrollo de las clases presenciales en Mendoza; y que el mismo fue variando “de acuerdo a las diferentes situaciones epidemiológicas que asumió la Provincia”.
Sin embargo, acto seguido marcaron que “resulta necesario dejar sin efecto la aplicación de la norma mencionada”. En tanto, será la Subsecretaría de Educación la que comunicará la “actualización de los protocolos sanitarios de forma ágil y eficiente, por lo que se debe generar una nueva norma legal que la habilite”.
De esta manera, el artículo 1 deroga la resolución 243 de la DGE del 17 de febrero, y deja “sin efecto el Protocolo Sanitario de la citada norma”.
En tanto, el artículo 2 faculta a la Subsecretaría de Educación “para comunicar la actualización de los protocolos sanitarios para el desarrollo del servicio educativo en los establecimientos que dependen de la Dirección General de Escuelas”.
La decisión, lógicamente se tomó teniendo en cuenta la baja considerable de casos de coronavirus en Mendoza en los últimos meses, sobre todo luego del pico de comienzos de año; en conjunto con un avance significativo de la vacunación en la provincia, tanto con la primera y la segunda dosis de refuerzo.
Así era el protocolo que dejó sin efecto la DGE
- Las escuelas deberán recabar la información sobre la vacunación contra COVID-19 de toda la comunidad educativa, así como la del calendario nacional.
- Se eliminan las burbujas.
- Asistencia cuidada: ante la presencia de síntomas o malestar general-asociado o no a COVID-19-, el personal y los alumnos no deben acudir a las escuelas y deben permanecer en aislamiento siguiendo los criterios vigentes. Se recomienda que realicen la consulta médica correspondiente.
- Quien presente síntomas que no sean compatibles con COVID-19, luego de 24 horas sin ellos, puede volver a la escuela.
- Ante la presencia de casos de COVID-19 se debe cumplir el aislamiento previsto, así como las medidas ante contactos estrechos según condición de vacunación.
- La sospecha y confirmación de casos no implica necesariamente el cierre del aula ni la interrupción de las clases presenciales.
- Uso obligatorio de barbijo a partir del Nivel Primario: debe tapar nariz, boca y mentón, bien ajustado a la cara y durante toda la jornada educativa en espacios cerrados.
- La ventilación debe ser cruzada y constante.
- Higienizar y limpiar regularmente los ambientes y mantener una adecuada higiene de manos.
- Priorizar la distancia en los momentos en que no se utilice barbijo.
- Se sospechará de un brote de COVID-19 en el aula en presencia de al menos tres casos confirmados entre alumnos/as de una misma aula -o alumnos y docente, para el caso de docentes permanentes- asociados epidemiológicamente, en un período igual o inferior a siete días.
- Se promoverá el estudio etiológico de los brotes (confirmar los primeros casos con pruebas de laboratorio y los casos asociados por nexo epidemiológico) para identificar el riesgo de transmisión.
- En ese caso se notificará a los familiares de los estudiantes y al personal relacionado al aula.
- Frente a sospechas de brotes, la autoridad sanitaria realizará la evaluación de riesgo pertinente y se encargará de definir junto a las autoridades educativas las medidas a adoptar.