Mario Barletta comunicó en la tarde ayer su salida del bloque de la UCR que hoy preside Rodrigo de Loredo. El dirigente santafesino armará un monobloque, luego del malestar que le generó la salida de otros 12 diputados que hoy integran la bancada “Democracia para siempre” que preside Pablo Juliano. “Planteó que a su edad ya no está para ser parte de un espacio roto”, aseguran entre los participantes de la reunión que se realizó esta tarde.
Barletta, junto con Julio Cobos, fueron los diputados que encabezaron la misión de mantener la unidad del bloque. Ambos habían gestado la creación de una mesa de diálogo para contener las tensiones que se habían generado con los cinco “radicales con peluca” que ayudaron a Javier Milei con los vetos a la Reforma Jubilatoria y la Ley de Financiamiento Universitario.
La foto de esos correligionarios con funcionarios nacionales y referentes del PRO, el MID y LLA no molestó sólo a los 12 que se fueron a crear un nuevo bloque. “Antes las invitaciones a reuniones con el Gobierno las debatíamos hasta tres días, en el 99% de los casos desistimos porque era una imagen que sólo beneficiaba al oficialismo. A De Loredo se le nota la desesperación porque no le va bien en Córdoba”, reprocharon dirigentes históricos que todavía influyen en la vida partidaria y la escena política.
Según detalló Infobae, bajo el mando de De Loredo había un grupo de “incómodos”, entre ellos, Julio Cobos, Karina Banfi, Fabio Quetglas, Martín Tetaz, Natalia Sarapura, Gerardo Cipolini y el propio Barletta. Incómodos “con los cinco radicales con peluca y la relación entre los bloques y el partido. Y también con la figura de Rodrigo”, habían respondido en este sector quienes, entre ellos, sostenían: “Se tiene que ir Mariano Campero, no Barletta”.
Para la reunión de esta tarde, que comenzó a las 18, los “incómodos” tenían planeado hacer un pedido sobre el rol de los “radicales con peluca”: “Tenemos que ser 20. Se tiene que ir Campero porque hay ruido con su personalidad”, aseguraron como primer punto. En segundo lugar, iban a plantear que las reuniones con el Gobierno se realicen en el ámbito del Parlamento, y por último, que los temas a tratar con el Poder Ejecutivo estén conversados y acordados dentro de la bancada.
Sin embargo, nada de eso pasó, según pudo reconstruir el mencionado medio. Campero se quedó y Barletta se fue. Además, el resto de los puntos tampoco se habrían planteado. Algunos de los presentes aseguraron que se repasaron los hechos transcurridos en la semana y avanzaron en temas relacionados con la agenda parlamentaria. “No fue una reunión tensa. Al final del encuentro Mario, que estaba conectado desde el Zoom, comunicó su decisión de armar un monobloque”, agregaron.
Ante esto, entre los “radicales con peluca” coincidieron: “Fue una reunión mucho más tranquila donde hablaron algunas cuestiones como para que tengamos algún tipo de identidad. Por supuesto está todavía la visión del medio y la visión colaboracionista con el Gobierno que es la nuestra”. Pese a esa diferencia, consideraron que de ahora en más “va a ser mucho más fácil encontrar puntos de coincidencia en donde no va a haber tantísima diferencia”. Sin embargo resaltaron: “Hubiéramos preferido que sigamos en el debate con con los K adentro porque hasta incluso creo que enriquece ese debate”.