Luego de que el Gobierno de Javier Milei incrementara en un 270% el presupuesto para la Universidad de Buenos Aires, diferentes casas de estudio del país se pronunciaron en contra del aumento “exclusivo” y reclamaron una actualización igualitaria. En este sentido, el bloque de Diputados de la Unión Cívica Radical tomó cartas en el asunto y solicitó una sesión especial en la Cámara Baja para la próxima semana.
Por medio de un comunicado, la bancada que preside Rodrigo de Loredo informó que buscará que el martes 21, a las 14 horas, se trate “varias iniciativas por las cuales se busca garantizar la actualización de las partidas presupuestarias de todas las universidades del país”.
En el texto, los legisladores destacaron que “el reciente aumento de un 270 % sobre el Presupuesto 2023 otorgado a la Universidad de Buenos Aires (UBA) implica de parte del Gobierno reconocer la necesidad de una adecuación presupuestaria para poder garantizar el funcionamiento de las instituciones universitarias”.
“En ese contexto, -continuaron- los diputados del radicalismo exigen que el mismo criterio sea utilizado para el resto de las 60 casas de altos estudios que, en todo el territorio nacional, enfrentan las mismas dificultades que la UBA para poder garantizar el normal desarrollo de las actividades académicas”.
El documento que cuenta con la rúbrica de los 34 legisladores que integran el bloque de la UCR en la Cámara presidida por Martín Menem, le marca la cancha al Gobierno al remarcarle que “no puede promover una nueva grieta en el país”.
“No puede haber discriminación, docentes y alumnos de todo el país deben ser tratados de la misma manera, con el mismo criterio de exigencias y controles”, concluyen.
El pasado miércoles se anunció la actualización de un 270% para los gastos de funcionamiento de la UBA, por lo que el Consejo Superior de la institución levantó la emergencia presupuestaria. Esta noticia no cayó bien en el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), en donde calificaron la medida como “provocadora”.
“Resulta inadmisible y provocador que se reconozca sólo para una universidad y no para la totalidad del sistema que reúne a un conjunto de 60 universidades a lo largo y a lo ancho de todo el país, que representan a dos millones de estudiantes de las universidades argentinas. No aceptaremos que existan estudiantes de primera y de segunda”, expresaron tajantes en un comunicado.
Por su parte, el Gobierno negó un trato “exclusivo” hacia la casa de estudio bonaerense y detallaron que “no hay ningún tipo de target o de discriminación entre algunas universidades u otras”.
En su habitual conferencia de prensa, el vocero presidencial Manuel Adorni explicó: “Con todas se está terminando de diseñar el ajuste presupuestario porque cada una tiene cuestiones que atender. No se puede generalizar, cada universidad es distinta. Simplemente por eso y no, no está en nuestra esencia negociar este tipo de cosas por votos para la Ley Bases. Eso no ocurre”.