El policía Alejandro Domínguez (31), que fue separado de la fuerza tras filmarse con el uniforme y decir que “podría ser bipolar” para postularse a Gran Hermano, al igual que varios efectivos que egresaron desde el 2016 a esta parte, debió atravesar rigurosas pruebas psicológicas para convertirse en oficial. Por lo que esa patología habría sido descubierta con anterioridad.
Es que las carreras que dicta el Instituto Universitario de Seguridad Pública (IUSP) tanto para técnico como auxiliar en seguridad pública, cuentan con estrictas pruebas en el ingreso. Se trata de cuatro etapas, dónde evalúan sí la personalidad del aspirante corresponde al perfil laboral que se necesita para ejercer como policía.
El director del IUSP, Alberto Rivero contó a diario Los Andes que desde el 2016 con la modificación de la Ley 6722, se fijaron ciertas pautas como modificaciones en el ingreso tanto en la edad (de 18 a 30) como en los estudios cursados (secundario completo) y antecedentes penales.
Además aseguró que sólo el 20% de los aspirantes llega a ingresar para auxiliar y un 15% de los que atraviesan esas pruebas lo hacen para la tecnicatura. Actualmente son 1434 los alumnos que hay en las distintas delegaciones: sede central, zona Este, Valle de Uco y Sur provincial.
“Los aspirantes tienen que aprobar un proceso de cuatro etapas. Lo primero que hacemos es un examen psicológico, otro físico y un reconocimiento de comprensión de textos. Si aprueba esos tres exámenes pasan a una segunda etapa, dónde tienen una entrevista individual con el equipo de psicólogos”, comentó Rivero.
Y explicó: “Cada postulante que ha pasado la primera es entrevistado en la segunda etapa por los psicólogos, durante unos 50 minutos. Ahí se ven aspectos más profundos de la personalidad para saber si la persona realmente tiene el perfil que le permita desarrollarse como profesional”.
A propósito el Coordinador del Equipo de Psicólogos del IUSP, Adrián Herrera, acotó que allí se administran una serie de técnicas de exploración psicológica de características dinámicas que apuntan a conocer la estructura de la personalidad del ingresante. “Uno no puede aplicar los tests de manera aislada, por eso se hacen en el contexto de una entrevista. No hay respuestas estandarizadas sino variables”, explicó.
Y en función de esto, elaboran un informe psicológico “objetivo” para ver si el aspirante tiene compatibilidad con el perfil buscado. “Esto incluye el manejo de la ansiedad, la adaptación a la realidad y que la estructura de la personalidad no presente características patológicas que repercuta en el ejercicio”, detalló Herrera.
De esta manera, el rasgo de la bipolaridad que Domínguez había anunciado, hubiera sido detectado en su momento. El profesional comentó: “Hay bastante desconocimiento de lo que es la bipolaridad, inclusive por parte del efectivo de haberlo mencionado. Se trata de un trastorno del estado de ánimo que requiere medicación psiquiátrica y es de carácter crónico. Se caracteriza por que el estado de ánimo de la persona transcurre por ciclos: en un momento puede estar en un estado maníaco, es decir con una energía voraz y posteriormente cae en un estado depresivo”.
“Hablando puntualmente de este chico, se hicieron todos los procedimientos pertinentes como esas tres evaluaciones para que pueda pasar a admisión y fue entrevistado por el equipo de psicólogos. No se detectaron indicadores que den cuenta una patología de bipolaridad, sino no hubiera ingresado”, afirmó.
Por su parte, Rivero comentó que “es notorio un desajuste en lo que refiere al régimen disciplinario” de Domínguez por haberse filmado con uniforme y comentó que su situación “la van a juzgar los psicólogos de sanidad policial y el equipo psicotécnico que hace el seguimiento al personal policial”.
La Inspección General de Seguridad separó a Domínguez de la fuerza y le quitó su arma reglamentaria, apenas se viralizó el video que el efectivo había subido a la red social Tik Tok. Además de las pericias psicológicas y psiquiatras que se le van a llevar a cabo, se le inició un sumario. Esta semana será citado para que ejerza su derecho a defensa.