Dos senadoras nacionales por Mendoza participaron de la audiencia pública a la que fue sometido el candidato a ministro de la Corte Suprema de Justicia Ariel Lijo, pero sólo uno de ellas habló. Se trata de Anabel Fernández Sagasti (PJ), quien cuestionó al postulante y su impulsor, el presidente Javier Milei.
“Aceptar lugares que les corresponden a las mujeres y aceptar lugares por decreto no sólo habla de quienes aceptan, sino de quienes los designan”, expresó Fernández Sagasti, quien es vicepresidenta de la comisión de Acuerdos del Senado, el órgano que llevó adelante la audiencia.
La legisladora consultó también si Lijo había hecho “la capacitación obligatoria en género, conocida como ley Micaela”, además de otras cuestiones, como la opinión del candidato sobre la constitucionalidad de los tratados internacionales de derechos humanos y de “la dolarización en la economía argentina”.
En sus respuestas, Lijo aclaró que no figuraba la capacitación de la ley Micaela en su curriculum porque había “una omisión” y sostuvo acerca de la dolarización: “tengo una idea formada, estoy de acuerdo con usted en que el Congreso tiene función específica en el artículo 75 inciso 19 que puede ejercer y el resultado de esa situación tiene que poder ser revisado judicialmente”.
En el caso de Juri, en cambio, no hubo intervención en la audiencia. “Leí las respuestas que hizo en forma escrita a las 482 preguntas y, además, los otros senadores han preguntado bastante”, aclaró ante la consulta de Los Andes la otra integrante de la comisión de Acuerdos.