En pleno receso escolar, el Gobierno provincial avanzó con una medida directa contra la organización del Sindicato Unido de Trabajadores del Estado (SUTE). Es que decidieron prohibir las asambleas gremiales en horario escolar y el ingreso a los establecimientos de personal ajeno al mismo.
En la Resolución N° 2712, publicada este miércoles en el Boletín Oficial, la DGE toma como argumentos una sentencia que la Suprema Corte de Justicia realizó a favor de la Administración Central por una reglamentación similar de asambleas. El gremio SITEA lo había apelado en su momento, pero la Justicia finalmente la avaló.
Además citaron a la Convención sobre los Derechos del Niño, que indica que “el interés superior del niño es un principio regulador de la normativa de los derechos del niño y se funda en la dignidad misma del ser humano, en las características propias de los niños y en la necesidad de propiciar el desarrollo de éstos, con pleno aprovechamiento de sus potencialidades…”.
Otro de los argumentos de la resolución firmada por el Director General de Escuelas, José Thomas, fue el impedimento del desarrollo de actividades religiosas en días hábiles dentro del horario de la jornada escolar; ya que el servicio educativo no se puede ver resentido ni afectado de “manera alguna” por estos actos.
De esta forma resolvieron que “toda actividad, ocupación, acción y/o uso” de establecimientos educativos de todos los niveles y modalidades de gestión estatal, que estén bajo la órbita de la DGE y que se realicen en el marco de la Ley N° 23.551 o por los estatutos sindicales, “deberán finalizar quince minutos antes del inicio de la jornada escolar o bien, comenzar después de transcurridos quince minutos de la finalización del horario de clases”.
Cabe destacar que establecieron que estas actividades deben ser notificadas con 48 horas de anticipación. En el caso de las escuelas albergues, “no podrán realizarse durante el período y hasta el horario en que dura la albergada de los alumnos en los establecimientos educativos públicos de gestión estatal”, afirmó la DGE.
Por otra parte indicaron que “en ninguna ocasión, ante la realización de las asambleas o reuniones de personal detalladas precedentemente, podrá ingresar al establecimiento escolar, personal ajeno al mismo; siendo responsabilidad de la Autoridad escolar, velar por el cumplimiento de ello, y de la presente; debiendo en caso de incumplimiento o imposibilidad, dar la inmediata intervención a la Supervisión correspondiente de la Dirección General de Escuelas”.
Esta medida se realiza luego de que el SUTE anunciara un paro de 48 horas en todas las escuelas para el regreso a clases, tras el receso invernal. Es decir, el 26 y 27 de julio. Reclaman apertura inmediata de paritarias, aunque el Gobierno haya convocado a negociaciones para la última semana de este mes.
Al respecto el secretario general de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA Mendoza), Gustavo Correa, sostuvo que “hay un hartazgo importante de la DGE con que nosotros nos organicemos y por eso elige caminos antidemocráticos para resolverlo. Con esto el Director General de Escuelas pretende mermar nuestra lucha”.
Y aseguró que llevarán este asunto a la Justicia: “Vamos a hacer la presentación correspondiente porque la resolución atenta contra la libertad sindical. Es restrictiva con nuestro derecho y lo que intenta hacer es desviar la discusión de hoy que es el salario”.
“La DGE tiene la hipocresía de hablar del interés superior del niño cuando hay chicos que se tienen que sentar en tachos de pintura, algunos no pueden ir a la escuela porque le cortan el gas por falta de pago y otros tienen que ir al mismo baño que los docentes o están hacinados en un aula”, enfatizó el dirigente gremial.
