Luego de que se ratificara la designación de Gabriel Rubinstein como viceministro de Sergio Massa, comenzaron a salir a la luz controvertidas publicaciones que este había hecho en redes sociales como Twitter y Facebook.
Se conocieron una colección de memes y mensajes que el economista y flamante número dos del líder del Frente Renovador había compartido en sus redes sociales criticando duramente al kirchnerismo. Incluso, en uno de los mensajes, que publicó el 15 de junio de 2016, Rubinstein apuntó contra la vicepresidenta Cristina Kirchner, socia mayoritaria del Frente de Todos.
Ese día el economista compartió una imagen de la entonces jefa del Estado mientras cavaba con una pala durante un acto oficial en los jardines de la Casa Rosada. Se trata de un meme que iba acompañado de un diálogo ficticio en el cual se aludía en tono irónico a las causas judiciales contra el kirchnerismo por supuesta corrupción.
Pero ese no fue el único mensaje crítico del director de GRA Consultora que se viralizaron durante las últimas horas. En Twitter, el economista no solo ha cuestionado las políticas implementadas por Cristina Kirchner durante sus mandatos como presidenta, sino también el rumbo de la gestión de Alberto Fernández. De hecho, ha retuiteado cuestionamientos al Gobierno de fervientes opositores al oficialismo, como Patricia Bullrich (Pro), José Luis Espert (Avanza Libertad) o la economista liberal Diana Mondino.
“Para mí, sumarse al kirchnerismo sería como decir: ‘Soy un idiota, pero vivan Néstor y Cristina, carajo’”, escribió en septiembre de 2014.
Entre diciembre y marzo de 2015, el economista apuntaba contra Cristina Kirchner por su embestida contra el Poder Judicial y su administración de las cuentas públicas. “Miles de ñoquis, corrupción al máximo, perversión a más no poder, ignorancia por doquier. Ese fue el Estado ‘presente’ de Cristina Kirchner. Una basura”, señaló.
En su cuenta de Twitter, sugirió que la expresidenta y sus colaboradores más estrechos “merecerían terminar en cana”. “En silencio, masticando rabia, esperemos que desde 2016, Cristina Kirchner y compañía puedan ser juzgados (y muy probablemente) condenados. Delitos no faltan”, dijo.
En otro tuit, aseguró que la entonces presidenta “contribuyó a degradar a la Justicia revirtiendo una de las pocas cosas que se hicieron muy bien en la era K: el cambio en la Corte Suprema”.
Además, dijo que esperaba un “amplio triunfo opositor” en las elecciones presidenciales de 2015 y que se cree una “CONADEP anti-corrupción” para “minimizar el riesgo de que Cristina Kirchner vuelva” al poder.
También llegó a calificar al gobierno kirchnerista como el “más autoritario” desde la última dictadura militar. “Y, seguramente, es el más mentiroso de nuestra historia”, afirmó.
También arremetió contra el Presidente por el escándalo de la fiesta de cumpleaños de la primera dama Fabiola Yáñez que se realizó en la quinta de Olivos durante la cuarentena estricta por la pandemia de coronavirus. El 2 de abril pasado, Rubinstein comentó una noticia sobre el pedido de disculpas de la esposa del jefe del Estado por el festejo en la residencia oficial: “Impresentables”, lanzó.
Días atrás, en una entrevista que concedió al Canal de la Ciudad, el economista consideró que bajar el gasto público es la “condición básica para terminar” con la inflación. Y sugirió que Cristina Kirchner “no entiende” que la causa de la escalada inflacionaria es la emisión monetaria.
“Este gobierno es incapaz mentalmente de bajar el gasto público. Tiene taras mentales, empezando por Cristina, que directamente no entiende el fenómeno. Otros lo entienden, pero no son potentes o no tienen suficiente desarrollo político”, puntualizó.
Según Rubinstein, “eliminar el déficit fiscal no tiene un costo económico, sino político”. “En el fondo reemplazas el impuesto inflacionario por otros impuestos, como aumento de tarifas”, apuntó.
Cercano a Roberto Lavagna, Rubinstein es el elegido de Massa para asumir como secretario de Programación Económica y viceministro de la cartera de Economía.
Rubinstein estudió Economía en la Universidad de Buenos Aires (UBA) e hizo cursos de posgrado en Macroeconomía, Microeconomía y Crecimiento Económico en el Instituto de Desarrollo Económico y Social (IDES). Fue miembro del comité de riesgo soberano DCR-Fitch Ratings, director ejecutivo de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y director del Estudio Broda.
Fue asesor de Lavagna, como representante de Hacienda en el directorio del Banco Central (BCRA). A la vez, integró el equipo que negoció los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y participó en la renegociación de la deuda pública, entre 2002 y 2005.