De manera sorpresiva, la Cámara de Diputados comenzará a meterse en el debate sobre los proyectos de alcohol cero al volante. Son siete iniciativas que buscan modificar la Ley Nacional de Tránsito, donde se establece una tolerancia de 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre.
Los proyectos empezarán a tratarse el próximo martes desde las 16 en la Comisión de Transporte, que preside el radical tucumano José Cano. La reunión será presencial, en el Anexo de la Cámara baja, y podría contar con la participación de invitados.
El principal impulsor de la tolerancia cero fue el exdiputado Facundo Moyano, que renunció a su banca a mediados de agosto por diferencias con el Frente de Todos. Moyano presentó dos proyectos al respecto y presionó durante meses para que Cano convocara a la comisión.
Una de sus propuestas busca modificar algunos artículos de la Ley Nacional de Tránsito, fundamentalmente el 48, para que ninguna persona pueda conducir cualquier tipo de vehículo con motor con una concentración de alcohol en sangre superior a cero. La segunda, más amplia, modifica también el Código Penal y la Ley de Lucha Contra el Alcoholismo.
Según la redacción propuesta por el exlegislador, “queda prohibido conducir con impedimentos físicos o psíquicos, sin la licencia especial correspondiente, habiendo consumido estupefacientes o medicamentos que disminuyan la aptitud para conducir o con una concentración de alcohol superior a cero (0) miligramos de alcohol por litro de sangre”.
Moyano había logrado el apoyo de la SEDRONAR, de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y de familiares de víctimas, así como del fallecido ministro de Transporte, Mario Meoni, que participó de la presentación junto al presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, en el mes de abril.
También hay proyectos de los diputados Estela Mary Neder y Graciela Caselles por el Frente de Todos; Martín Maquieyra e Ingrid Jetter por el PRO; y la tucumana Beatriz Ávila, del Partido por la Justicia Social. Todos tienen giro a las comisiones de Seguridad Interior y de Prevención de Adicciones, además de Transporte.
La alcoholemia cero ya fue rechazada por legisladores nacionales mendocinos y entidades vitivinícolas, que se mantienen en estado de alerta desde que el tema empezó a ganar terreno. Sostienen que los proyectos son “demagógicos” y que detrás de ellos hay un lobby de la industria de bebidas azucaradas.
Según datos oficiales que recogió Moyano, en 2016 se registraron 5.582 víctimas fatales en accidentes de tránsito; en el año 2017, la cifra fue de 5.611 personas fallecidas; mientras que en 2018 hubo 5.493 muertes en siniestros viales. Es, además, la principal causa de muerte en jóvenes.
“Un consumo de alcohol de 0,1 a 0,5 gramos por litro de sangre produce un aumento del ritmo cardíaco y de la frecuencia respiratoria, disminución de la actividad de diversas funciones cerebrales centrales, comportamiento incoherente al ejecutar tareas, disminución del discernimiento, pérdida de inhibiciones y una sensación moderada de exaltación, relajación y placer”, argumentó el exdiputado en base a estudios de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Actualmente, las provincias de Córdoba, Salta, Tucumán, Entre Ríos, Jujuy, Río Negro y Santa Cruz, y ciudades como Santa Fe, Rosario y Mar del Plata tienen normativa de alcohol cero en sus territorios. En los últimos meses, varias localidades se sumaron a esta iniciativa, como Moreno, Tigre, General Rodríguez, Ezeiza y Ramallo.