A dos días de la nueva indagatoria, el expresidente Mauricio Macri volvió a recusar al juez federal de Dolores, Martín Bava, para que sea apartado de la causa en que se investiga presunto espionaje a los familiares de las víctimas del hundimiento del ARA San Juan, ocurrido en 2017.
Con el antecedente del jueves, cuando la audiencia fracasó porque no se relevó el secreto de inteligencia del exjefe de Estado, la defensa encabezada por Pablo Lanusse insistió este lunes en recusar a Bava para que no participe en la causa. Además pidió que la audiencia prevista para esta semana se suspenda hasta que se resuelva el planteo de apartamiento.
“A partir del comportamiento y actos desplegados por el Dr. Martín Bava tenemos la inamovible convicción y certeza de encontrarnos ante un Magistrado que ha roto su confianza y que se ha despojado de su investidura de Juez de la Constitución Nacional para colocarse un triste y repudiable ropaje que aniquila su condición de imparcial e independiente y obliga, ante la trascendencia y gravedad de lo ocurrido, a que se disponga su apartamiento”, advirtió Lanusse.
El abogado, además, cuestionó a Bava porque “actuó sin moderación, mesura, adecuada compostura, objetividad, imparcialidad, ecuanimidad, rectitud” y acusó falta de “estilo moderado”.
La defensa de Macri también recordó que Bava omitió avanzar con el relevamiento del secreto que está contemplado en la ley de inteligencia, razón por la que la declaración indagatoria de la semana pasada quedó trunca. “Fue un error grosero del juez (Martín Bava). Un acto bochornoso”, señaló Lanusse en ese momento.
Tras el escrito de hoy, Bava deberá responder la nueva recusación. Se espera que rechace los argumentos y avance con la cita fijada para el próximo miércoles a las 12.
Desde el entorno de Macri mantienen la postura de que todo se trata de la campaña del oficialismo para desacreditarlo, teniendo en cuenta las elecciones legislativas del 14 de noviembre y la victoria en las PASO de Juntos por el Cambio.
Vale recordar que Macri ya había recusado al juez Bava el pasado 20 de octubre por “prejuzgamiento y temor fundado de parcialidad”. Para el exjefe de Estado, el magistrado mostró un “compromiso emocional, cognitivo y personal” cuando se colocó en un escrito como “una suerte de potencial víctima de lo que él ya sentencia apodícticamente como un plan sistemático de inteligencia ilícito”.