Cinco meses después de que un integrante del Consejo de la Magistratura de la Nación propusiera que el juez mendocino Walter Bento sea suspendido por pedir coimas a cambio de favorecer presos, entre otras duras recriminaciones, el proceso tendrá este miércoles su primer avance importante en lo formal.
Aquel dictamen de noviembre del año pasado, que fue emitido por el diputado del Pro Pablo Tonelli, volverá a estar en trámite en el Consejo de la Magistratura y saldrá del limbo en el que quedó entonces.
Esto ocurrirá en el marco de la primera reunión del año de la comisión de Acusación. Tonelli la presidió hasta el penúltimo mes de 2022, pero luego de emitir el dictamen contra Bento, su mandato como integrante de la Magistratura finalizó y el organismo, en general, se paralizó.
Las disputas políticas respecto de la nueva integración de la Magistratura se extendieron hasta comienzos de este mes, cuando el Consejo se puso nuevamente en marcha a través de un plenario, el primero de los últimos 8 meses.
En esa reunión se eligieron las nuevas autoridades del organismo y los integrantes de las comisiones. En este contexto, se formalizó la nueva integración de la comisión de Acusación, que trata las causas más graves contra jueces federales. Entre ellas se encuentra la denuncia contra Bento.
En concreto, quienes deberán aprobar o desechar el dictamen que dejó Tonelli serán Miguel Piedecasas (abogado UCR), Roxana Reyes (diputada UCR), Vanesa Siley (diputada PJ), Rodolfo Tailhade (diputado PJ), Héctor Recalde (abogado PJ), Eduardo Vischi (senador de la UCR) y Álvaro González (diputado del Pro).
La comisión que debería comenzar a resolver el destino del juez mendocino está presidida por Piedecasas, quien informó a Los Andes cómo procederá este miércoles respecto del dictamen acusatorio.
“Voy a poner en conocimiento de la comisión de Acusación el dictamen presentado en su oportunidad por el doctor Tonelli y las presentaciones posteriores que hizo el magistrado”, señaló Piedecasas. También indicó el abogado radical: “Lo más probable es que se tome conocimiento del estado de situación del expediente y que en la próxima reunión se lo analice y trate”.
El presidente de Acusación explicó que, una vez que los consejeros conozcan la causa Bento, pueden pasar varias cosas. Primero que nada, alguno de los miembros (incluido el propio Piedecasas) debe “hacer propio” el dictamen de Tonelli. Una vez que esto ocurra, se puede precipitar la votación o puede surgir un dictamen nuevo, incluso más amplio, por parte de alguno de los nuevos consejeros.
Lo que va a ocurrir en la comisión de Acusación no se sabe, solamente se puede pronosticar que los consejeros no votarán mañana mismo para definir si el juez tiene que ser suspendido o no.
Largo proceso
El titular del Juzgado Federal Número 1 de Mendoza, único juez con competencia electoral de la provincia, se encuentra procesado desde 2021 y a la espera del juicio por graves delitos, como asociación ilícita, cohecho y lavado de activos.
Ya se fijó el tribunal que lo juzgará ( se trata de tres juezas de otras provincias) y las primeras audiencias se realizarán el mes que viene. Más de 30 personas, entre ellas integrantes de su propia familia, estarán en el banquillo de los acusados.
La causa judicial, por otro lado, generó un expediente por mal desempeño que se tramita en el Consejo de la Magistratura de la Nación y que tiene casi la misma antigüedad que el penal. Ya se cumplieron todos los pasos reglamentarios en este organismo, que cuenta con 20 miembros. Incluso se defendió el propio juez, en dos extensas audiencias. Sólo resta la definición del proceso.
Tonelli pidió en este contexto que Bento sea suspendido en el cargo y que se le abra un procedimiento de remoción ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados. El dictamen que elaboró el legislador debe ser votado primero en la comisión de Acusación, y si pasa esa instancia, lo tiene que votar el pleno del Consejo.
En esta instancia, dos tercios de los miembros deben estar de acuerdo para que la suspensión se convierta en un hecho. Hasta entonces, por más que se avance en la faz penal, Bento seguirá ejerciendo normalmente sus facultades como magistrado.
En tanto, los abogados defensores del juez mendocino volvieron a sostener la semana pasada que Bento es inocente. Fue en el marco de un curso que se hizo en Malargüe al que asistieron el porteño Mariano Cúneo Libarona y el local Gustavo Gazali, y que trataba precisamente sobre “delitos de funcionarios públicos”.
“No se ha podido comprobar nada de lo que se dice y no hay enriquecimiento ilícito del doctor Bento. La causa está armada por un fiscal y un juez que fabricaron pruebas. La Cámara Federal y el juez de la causa avanzaron en contra de un juez que no tenía el mismo color político que ellos”, aseguró Gazali en este contexto, en declaraciones a la prensa.