El Concejo Deliberante de Maipú aprobó esta mañana en una polémica sesión modificaciones en el reglamento interno del cuerpo, en el cual endureció los requisitos para remover algunos cargos internos y que son clave para el funcionamiento del propio organismo. La votación salió favorable para el peronismo, ya que si bien hubo empate con 6 votos a favor y 6 en contra (5 de Cambia Mendoza y el restante del FIT), desempató el presidente del Concejo Deliberante, Isaac Morales, a favor de las modificaciones.
La reforma despertó el enojo del radicalismo, quienes argumentaron que el peronismo “se está preparando para perder la mayoría que tiene en el Concejo y quiere blindar a sus funcionarios”. En tanto, desde el oficialismo comunal sostuvieron que están “acomodando el reglamento a la Constitución y a la ley orgánica de Municipalidades” y acusaron a la UCR de querer “ir por todo” a partir de mayo y “presionar” al intendente Matías Stevanato en los dos años que quedan de mandato. “Quieren meterse en la línea sucesoria del Intendente, es un atropello institucional”, agregaron.
La estrategia ha sido clara. En el oficialismo decidieron pasar de mayoría simple a mayoría especial como requisito para remover cargos importantes del Concejo, como lo son el del presidente del Concejo Deliberante (y los dos vicepresidentes) así como también el del secretario legislativo (que hoy tiene a César Solá) y la de la directora general de Administración (hoy con Gisel Martos en el cargo) para evitar que el radicalismo pueda hacerlo luego del recambio del Concejo Deliberante, en el cual tendrá mayoría con 7 ediles, pero no alcanzará a los 8 necesarios para llegar a los dos tercios de los votos.
De esta manera, y tal como se aprobó ayer, en vez de mayoría simple -como estaba estipulado anteriormente -, se podrá remover a estos dos cargos sólo con mayoría especial. Esto significa que, si no hay un acuerdo entre las partes, al menos hasta el 2023 no se podrá remover ni al presidente, ni a sus vicepresidentes (todos finalizarán su mandato en febrero del 2023).
Tampoco lo podrán hacer con los cargos de Secretario Legislativo y Directora General de Administración, con la diferencia que éstos no tienen fecha de finalización. Además, si ninguno de los dos frentes consigue mayoría especial en los comicios que vienen, ambos cargos podrían quedar ocupados por los mismos funcionarios hasta que haya acuerdo entre las partes.
Hay un punto clave, que es que, según informaron desde la comuna de Maipú, se está equiparando el reglamento “al mismo que tiene el Senado Provincial, así como también Guaymallén, Junín y Rivadavia, entre otros”, por lo que sugirieron que el radicalismo “tiene un enojo selectivo”.
Sin diálogo
Sin dudas la modificación de la ley deja expuesta a la política la desconfianza que hay entre ambos frentes políticos.
En el PJ advierten que sin esta reforma, el radicalismo habría “copado” a partir de mayo el Concejo Deliberante de puestos radicales aún en la intendencia de Stevanato, como un acto de mala fe. “No hubiese sido lógico, este radicalismo ha demostrado que quiere ir por todo, como cuando no aceptaron la vicepresidencia del Concejo Deliberante. Tiene que primar el diálogo, pero por ahora no está”, sostuvo a Los Andes el flamante presidente del cuerpo, Isaac Morales, que reemplazó a Elián Japaz.
En el radicalismo responden, naturalmente, lo contrario, y sostienen que se trata de un “intento desesperado por perpetuarse en el poder pese al mandato de las urnas”. “Con estas actitudes, Stevanato demuestra una vez más el atropello constante a las instituciones y desoye la voz de las urnas”, acotaron desde el bloque de Cambia Mendoza. Además, destacaron a Los Andes que “de ninguna manera la idea es tener la presidencia del Concejo”, aunque en el peronismo creen lo contrario.
Para Mauricio Pinti, jefe de bloque del espacio opositor, se trata de un “aprovechamiento político” del oficialismo. “Hoy no tienen mayoría y vienen de perder las elecciones donde el pueblo de Maipú se manifestó. Tanto las autoridades del Concejo como las reformas carecen de legitimidad”, marcó, y adelantó que irán a la Justicia ya que entienden que hay vicios de ilegalidad.
Mientras tanto, desde el entorno de Stevanato volvieron a la carga contra Pinti: “Es cierto que perdimos las elecciones, pero ¿qué espera? ¿que dejemos sin funcionamiento el Concejo Deliberante hasta que ellos tengan la mayoría?”.
Sin dudas, ha quedado a las claras que el diálogo está cortado en Maipú, como hace tiempo que no hay tampoco conversaciones importantes a nivel provincial, aunque con cambio de roles (radicalismo oficialista y peronismo opositor). Desde hace varios meses, principalmente tras las elecciones intermedias, que la tensión ha ido en aumento entre ambos partidos, y nada hace parecer que vaya a cambiar a futuro, cuando el frente Cambia Mendoza tenga mayoría en el Concejo Deliberante.
Estrategias
Luego de la sesión, ambos espacios políticos realizaron sus descargos. Desde el PJ se envió un comunicado oficial; mientras que el radicalismo ofreció una conferencia de prensa en conjunto entre concejales y legisladores provinciales (principalmente de Maipú).
El comunicado oficialista fue titulado como “Otra mentira radical más” y expresaron que “los mismos que votaron en contra de la reducción del presupuesto del Concejo Deliberante, ahora están desesperados por los cargos. Respeten las instituciones”.
En el documento, defendieron el accionar del Concejo y acotaron que “todas las acciones llevadas adelante fueron en el marco de las leyes y normativas vigentes”.
También criticaron al radicalismo y apuntaron contra el subsecretario de Relaciones Institucionales, Néstor Majul, sobre quien dijeron que está “más interesado en la rosca política que en la seguridad de Mendoza”.
En tanto, la UCR señaló que “el Frente de Todos y La Cámpora tienen la misma manera de concebir el poder, cueste lo que cueste”.
“Pese a sus promesas de campaña de construir consensos a través del diálogo, el Frente de Todos dejó su eslogan de campaña y volvió a sus prácticas autoritarias. No tuvieron en cuenta la representación que debemos tener en la constitución del Concejo y de manera abrupta nombraron a las tres autoridades del cuerpo legislativo con concejales de su partido”, acusaron desde Cambia Mendoza sobre el Presidente del Concejo Deliberante y los dos vicepresidentes”.
Otros cambios
Además de estas reformas, en la ley se agregó la aparición en el organigrama de dos figuras más en el Concejo Deliberante, que es el de la dirección de Relaciones Institucionales; y la de subdirector de Administración.
Morales especificó que si bien la elección será con mayoría simple y su remoción con mayoría especial de los ediles, al igual que los de la dirección general de Administración y Secretario Legislativo; tendrá que haber acuerdo entre el oficialismo y la oposición para crear ese cargo, además de asignar montos y partidas.
“Lo que se votó es que estén previsto en el organigrama estos dos puestos, pero de ninguna manera se creó la vacante. Si queremos tener a estos dos funcionarios, o cualquier cargo más, deberá haber acuerdo con mayoría especial. Por eso es que instamos al diálogo”, completó Morales.
Y finalizaron: “No creamos cargos, le pusimos más condiciones para cuando se quieran crear, porque los radicales están desesperados por los cargos”, acotaron desde la comuna.