Si una palabra repite con insistencia el intendente de Maipú, Matías Stevanato, es “diálogo”. Con ese discurso como estandarte, ha vuelto tras un largo silencio mediático.
En esta entrevista con Los Andes, el jefe comunal que va por su segunda gestión asegura que el PJ construirá un verdadero proyecto de poder para 2027. No se descarta para la gobernación y pronostica que las diferencias dentro de su partido se resolverán en una “gran interna” antes de las legislativas del año que viene.
-Vienen desafíos importantes para el PJ. Su última elección provincial ganada fue en 2011 ¿Cómo van a hacer para remontar eso?
-Algunos lo definen como una situación complicada. Yo creo que lo que viene para el peronismo va a estar bueno. Porque el peronismo de a poquito se está reorganizando, se está generando un recambio generacional. Hay un peronismo que ganó, el que gestiona, que revalidó todos sus títulos en las últimas elecciones, que tuvo muy buenas elecciones en las siete intendencias, y que tiene ganas de aportar a un proyecto en el 2027 que construya una alternativa real de poder. Yo quiero colaborar en un gran frente que vuelva a enamorar a los mendocinos, pero que no sea un gran frente electoral, sino una alianza de gobierno real. El PJ hoy está empezando a transitar ese proceso.
-¿Pero la división que hay en la Legislatura no es un síntoma de descomposición?
-Es un proceso que se tiene que dar. El peronismo lo necesita. Cuando se produce un recambio de dirigentes, y principalmente cuando se empieza a analizar el hecho de que empieza a surgir una nueva conducción, obviamente que se van a dar algunas rispideces, pero es normal. Y es el proceso que necesita el justicialismo y que necesita la provincia. Porque la fortaleza de la democracia también necesita de un peronismo fuerte, de un peronismo renovado. Para mí, esta renovación se va a ir dando desde abajo hacia arriba, con proyectos departamentales que tengan que ver con lo que necesitan los vecinos, y que eso termine en un proyecto provincial de un peronismo bien mendocino.
-¿Tendrá un verdadero proyecto de poder el PJ?
-Había una realidad. Hoy yo estoy viendo otra totalmente distinta. Siento esas ganas de participar de muchos dirigentes que hoy vuelven a ver que hay esperanza en el 27. Con un modelo donde el PJ pueda ser la columna vertebral de un gran frente, que abrace a muchos dirigentes de otras fuerzas, que convoque también a, obviamente, dirigentes gremiales, representantes del sector académico y del sector empresarial. Hay que animarse a soñar esa provincia que vuelva a crecer. Y para eso, se necesita mucho diálogo y mucho laburo. Me imagino un peronismo bien mendocino. Muy parecido a lo que fue el equipo de los mendocinos en la década del 80 y que fue un proyecto de 12 años.
-¿Cómo va a dar el primer paso el PJ? Porque tiene que haber definiciones con La Cámpora y el kirchnerismo...
-Dentro del peronismo, con gestos. Varios compañeros me han venido a ver para ver si quiero ser el candidato a presidente del PJ a fin de año y la verdad que si hay que dar algún gesto, si hay que acompañar y yo tengo que dar un paso al costado para que pueda conducir el proceso algún dirigente del peronismo que pueda generar unidad, bueno, bienvenido sea, yo lo voy a hacer. ¿Acompañar? Si, voy a acompañar. Y si me preguntan: “usted intendente, ¿a quién se anima a proponer?” A Fernando Ubieta, un gran dirigente. Emir Félix, otro gran dirigente que tiene el PJ. Yo puedo tirar nombres arriba de la mesa sin la necesidad de poner el carro delante del caballo. Creo en los proyectos colectivos y no en los proyectos individuales. Yo me sumo para colaborar y aportar.
-¿Usted cree que el PJ va a ir a una interna a fin de año para la elección del nuevo presidente?
-Yo creo en la unidad. Para mí vamos a terminar todos poniéndonos de acuerdo, porque venimos hablando.
-¿Es posible que se geste la unión a partir de dirigentes que hoy dan la impresión que no estuvieran en ninguno de los dos bandos (el kirchnerismo y los intendentes)? Como Celso Jaque, por ejemplo.
-Quizás algunos grupos están un poquito más consolidados que otros. Pero puede ser una alternativa. Tiene experiencia y apuesta al diálogo. Yo lo acompañaría.
Yo creo que la elección de autoridades partidarias se tiene que dar en unidad y el año que viene ir a una gran interna, una gran PASO. Creo que va a pasar eso: ahora una unidad que genere condiciones para que jueguen muchos el año que viene, y tras la interna, el que gana conduce y el que pierde acompaña.
-Se dice también que el peronismo mendocino va a proclamar sus autoridades nuevas en fechas diferentes al PJ nacional.
-(Se ríe) Sería bueno eso.
-¿A nivel nacional el PJ va a seguir teniendo conducción kirchnerista o semi kirchnerista, con Kicillof a la cabeza?
-A nivel nacional van a pasar tantas cosas…hay figuras que van empezando a surgir como es el gobernador de Córdoba (Martín Llaryora), como (Guillermo) Moreno, que pasó de reuniones chiquitas a reuniones mucho más grandes…
-La semana pasada usted destacó en un tuit al peronismo cordobés…
- Yo estoy viendo un modelo y me llama la atención ese modelo. El modelo de Córdoba abrazó a muchos dirigentes de otras fuerzas políticas. Creo que eso es lo que viene. La gente va a priorizar a esos dirigentes que apuestan al diálogo. Ya no se banca más la discusión por la discusión.
-¿Qué importancia tienen en este “resurgimiento” del peronismo local las elecciones legislativas del año que viene?
-Son muy importantes.
-¿Otra vez estará la supervivencia legislativa como primer objetivo?
-No. Lo que yo digo es que el año que viene hay que poner toda la carne en el asador. Hay que poner a los mejores y hay que animarse a apostar a algunos dirigentes que no han tenido otras oportunidades. Y eso tiene que arrancar desde los concejos deliberantes y obviamente en la Legislatura provincial. Hay algunos sub-45 y otros dirigentes que están formados y que pueden tener un rol importante en Alvear, en Guaymallén, Las Heras y Godoy Cruz. Yo apuesto a eso. A que el peronismo pueda mostrar otras caras.
-¿Las figuras del peronismo están muy gastadas?
-Creo que parte del problema que tuvo el peronismo fue que se repitieron muchas veces pocas caras. Ahora tenemos la oportunidad de mostrar una renovación real. Y que los mendocinos empiecen a ver que hay otro peronismo. Un peronismo mucho más mendocino que tiene cuadros que son interesantes y que se animan a debatir, pero siempre con respeto.
-¿El futuro candidato a gobernador del PJ surgirá de ahí o de las intendencias?
-El peronismo de las intendencias es un peronismo que gestiona. Y que lo demuestra a diario. Así que de las intendencias puede salir un gran candidato a gobernador. Pero yo no me cerraría más en eso. Puede integrar la fórmula o puede aparecer algún dirigente del peronismo, como fue en 1987, porque (José Octavio) Bordón no venía de las intendencias, que enamore a los mendocinos ¿Dónde voy a estar yo? Si me pregunta puntualmente, acompañando ese proceso.
-Si me dice que no quiere ser candidato a gobernador, me estaría mintiendo…
-(Se ríe). Voy a dar la respuesta políticamente correcta y es que estoy trabajando por los maipucinos. Pero obviamente que sería un honor, porque es un honor para cualquier mendocino conducir el destino de Mendoza. Pero estoy seguro que cualquiera de los siete intendentes del PJ sería un gran gobernador de Mendoza.
-¿Cuántos sectores van a competir por el control del PJ?
-Usted dice que son dos. Yo estoy convencido que van a ser varios los sectores. Y está bueno, porque de ese escenario va a salir un resumen de lo que estamos necesitando. Mientras más gente quiera jugar y levantar el bastón de mariscal, más fuerza va a tener el PJ para 2025 y especialmente para 2027.
-¿Es cierto que hay peronistas que están volviendo al PJ tras su experiencia en La Unión Mendocina?
-El peronismo tiene los brazos abiertos para todos los dirigentes. Yo a nivel personal con Jorge Giménez y Roberto Righi hablo. Ariel Pringles es un gran cuadro. Si armamos algo más grande, muchos dirigentes más van a venir.
SUS PROBLEMAS CON LAS OBRAS NACIONALES Y LA COPARTICIPACIÓN
-¿Ha podido avanzar con las obras inconclusas de la Nación?
-Mandamos todas las notas que teníamos que mandar y la verdad es que puntualmente en el ENOHSA, con la obra grande que tenemos de las cloacas del este de Maipú, por ahora no tenemos una respuesta favorable. Y es una obra que va a beneficiar a más de 30.000 vecinos, para nosotros es la obra de saneamiento más importante de los últimos 40 años de nuestro departamento, no solamente porque mejora la calidad de vida, sino por el impacto ambiental que tiene. Está al 80% y ahora la tenemos paralizada.
Después tenemos todo un plan de vivienda que eso es mucho más complicado, hace dos domingos atrás tuvimos el intento de usurpación en una de las casas. Tenemos casas que están más avanzadas, entonces es complicado lo que se está viviendo.
Nosotros no estamos pidiendo obras nuevas, lo que pedimos es que las obras que ya estaban iniciadas, que cumplen con todos los procesos, que se continúen, que el Estado Nacional cumpla su parte contractual, si no obviamente vamos a tener que iniciar acciones judiciales. Es una locura tener que llegar a eso, porque lo que tienen que hacer es cumplir con lo que ya está firmado y está acordado.
-¿No hubiese sido un mejor camino que la obra de cloacas la iniciara la Provincia?
-La vía fue la Nación. Corresponde porque el ENOHSA es el organismo nacional que se encarga de esto. Si no fuéramos prestadores del servicio de agua y cloacas nosotros, sí se tendría que haber hecho a través de la Provincia. Pero como nosotros somos prestadores del servicio, está bien que se haya hecho a través de ENOHSA. Esto no implica que no hagamos gestiones con el Gobierno provincial. En este caso, esas obras que estamos planteando son ampliaciones de las cuatro plantas que tenemos. También estamos pidiendo para que la red de cloacas llegue al sur del departamento.
-El gobernador suele decir que estaba mal que acudieran a la Nación los intendentes para hacer obras menores ¿Qué opinión tiene de ese concepto?
-No, pero es que ese concepto hay que separarlo. Nosotros, la estación de Gutiérrez del Metrotranvía también la remodelamos. Fue este intendente quien lo gestionó en la Nación ¿Lo podríamos haber hecho con el gobierno provincial? Sí, se podría haber hecho, porque el Metrotranvía depende del gobierno provincial. Pero uno va avanzando cuando va viendo que la necesidad existe. Voy a poner otro ejemplo más: la construcción de escuelas. Nosotros estamos construyendo un edificio escolar ¿Por qué? Porque la matrícula escolar está superpoblada y la decisión que tomamos fue, bueno, avancemos porque la solución se la tenemos que dar a los vecinos.
-¿Pero no está mal que esa sea la única vía? La generalidad de los intendentes era ir a golpear las puertas de la Casa Rosada para poder hacer alguna obra, tuvieran buena o mala administración.
-Lo lógico sería que todos trabajemos. Pasan las elecciones y estamos todos en el mismo equipo. Y si uno puede ir a ver al Presidente, sea del color que sea, la idea es que el Presidente o los ministros nacionales te puedan atender y resolver los problemas. Lo mismo con el gobierno provincial.
Yo tengo mucha esperanza con la Mendoza que viene en el 2027, porque hay toda una camada de dirigentes que apuesta al diálogo, que entiende lo que significa cuando un intendente tiene que resolver. En la dirigencia que se ve para los próximos 20 años de Mendoza, yo puedo nombrar dirigentes del radicalismo, del Pro, del peronismo, con quienes venimos hablando y creo que está bueno. Va a haber mucho diálogo.
-Bueno, de hecho, la etapa que han iniciado los intendentes con Cornejo es medio inédita también. Tienen una relación política de mucha cordialidad.
-Estamos viviendo tiempos que son difíciles. Hay mucha violencia en la sociedad. Y por ende, quienes ocupamos cargos en el Ejecutivo, tanto municipal como provincial, tenemos que aportar nuestro pequeño granito de arena para tratar de solucionar los problemas que tienen los mendocinos y no que se agudicen más. Por eso se ve un gobernador que habla con los intendentes e intendentes que están viendo cómo colaborar en la temática que plantea el gobernador. No se ven críticas destructivas.
-¿Le convenció cómo se resolvió la disputa de la coparticipación municipal?
-Se perjudicó a los maipucinos. El radicalismo tenía la mayoría para sacar la ley, me hubiera gustado que los 400 millones quedaran en Maipú. Es injusto para nosotros. Se tiene que rediscutir la coparticipación, porque no es lo mismo administrar Santa Rosa o Godoy Cruz, o que, como Maipú, se preste el servicio de agua y cloacas o que no se esté prestando. La discusión puede llevar mucho tiempo, pero tiene que ser algo serio.
LA OPINIÓN SOBRE OTROS DIRIGENTES
Javier Milei: “Espero que haga las cosas bien. Tiene todas las herramientas. Se terminó de aprobar la ley Bases. Yo no estoy a favor de esa ley pero ya la tiene. Ahora se tiene que poner a trabajar, porque lleva siete meses viajando y recibiendo premios. En el medio hay más reclamos sociales porque la gente la está pasando mal, dicen que el desempleo baja pero yo veo más desempleo”.
Sergio Massa: “Está acompañando un proceso de recambio general en todo el país. Tiene experiencia, conoce desde La Quiaca a Ushuaia, tiene 52 años y mucho hilo en el carretel. Lo veo más activo desde el armado interno”.
Axel Kicillof: “No he tenido nunca la posibilidad de hablar con él. Todavía no me animo a nombrar a un conductor del peronismo a nivel nacional. El proceso se irá dando de a poco. Hay que esperar porque será un proceso más lento que el provincial”.
Cristina Kirchner: “El peronismo tiene que tomar lo mejor de Cristina y Cristina tratar de aportar al proceso que viene”.
Alfredo Cornejo: “Está apostando al diálogo, es el único que pudo volver a ser gobernador desde 1983. Tiene la fortuna de eso y la experiencia. Y tiene 1.023 millones de dólares. Si apuesta al diálogo para sacar a la Provincia adelante le puede ir bien. Es injusto ponerle una nota ahora”.
Omar de Marchi: “No voy a cambiar la opinión que tengo de él. Fue un gran intendente, no compartimos lo que está pasando con el gobierno nacional, pero eso no significa que no podamos tener diálogo. Hizo muy bien las cosas a nivel departamental y en poco tiempo armó una alternativa electoral en Mendoza y sacó 30 puntos”.