El Gobierno de Mendoza abonó en estos días parte de su deuda en pesos con bonistas y anunció una mejora en el perfil de vencimientos para los próximos meses, en el cual apunta a disminuir el stock de las acreencias en por lo menos un 5% cuando cierre el ejercicio 2023.
Según datos publicados por el Ministerio de Hacienda, la deuda total de Mendoza al primer trimestre del 2023, se registra un total de la deuda (flotante incluida) por U$S 975,7 millones, lo que corresponde a una baja significativa en los últimos meses, pero también en los últimos años.
Los datos, si se comparan desde el comienzo de la gestión de Rodolfo Suárez en diciembre del 2019, marcan que redujo la deuda en un 29,2% a la fecha, teniendo en cuenta que cuando comenzó su gestión el exintendente capitalino, el stock de deuda era de U$S 1.378 millones, según datos del ministerio de Hacienda que conduce Víctor Fayad.
No obstante, y si bien Mendoza ha salido a colocar deuda este mes, como por ejemplo los bonos “verdes” para la ampliación del Metrotranvía, se prevé una baja total para este cierre del 2023 en por lo menos un 5% del total de volumen de deuda.
De esta manera, de los U$S 975,7 millones que Mendoza debe a organismos según el stock de la deuda a marzo, se espera bajarlo para el comienzo del 2024 a U$S 926 millones.
Saldo y refinanciación
Sobre el bono en pesos, se trata del bono PMJ23 de $5.200 millones. En esta operación, se refinanciaron poco más del 50% de los Títulos de Deuda (unos $2.600 millones), “contribuyendo así al mejoramiento de la sostenibilidad de la deuda pública provincial y a la oportuna ejecución del plan de obras de infraestructura”, marcaron.
Para este caso, los títulos emitidos son a 18 meses y a una tasa equivalente a Badlar +5,75%, que amortizará en 6 cuotas trimestrales. De esta manera, la provincia obtuvo, según Hacienda, financiamiento a mediano plazo “destinado a inversión pública, a tasas por demás convenientes, renovando la confianza de los inversores institucionales”.
Sobre el modo de financiamiento, en el Gobierno marcaron que la tasa fue “muy beneficiosa para Mendoza, porque por ejemplo Neuquén ha tomado a tasa Badlar +9%, y nosotros estamos mucho mejor. Es una señal de la confianza de los inversores a Mendoza”.
En este sentido, es la tercera vez que se refinancia este bono (se hizo en 2021 y 2022); lo que librará a Mendoza de pagar saldos de capital en lo que resta del 2023 en este bono en particular.
No obstante, a mediados de mes se decidió, por otro lado, abonar a los bonistas los otros $2.600 millones, lo que significó una baja considerable de este bono.
Desendeudamiento
La baja en los montos de la deudas serán así, según el Gobierno, ya que en este primer semestre se debió saldar la primera cuota de capital más intereses de la deuda en dólares del bono de U$S 500 millones (Bono Mendoza 2029 - PMM29), pero además porque los últimos endeudamientos que ha tomado Mendoza no han sido tan significativos.
Como se mencionó, la disminución se ha visto traccionada particularmente por el pago en el mes de marzo de la deuda en dólares por U$S 60 millones; mientras que en septiembre vencerán otros U$S 60 millones.
Sobre esa operación, Mendoza anunció que realizará una presentación judicial para poder comprar la totalidad de los U$S 60 millones al valor oficial, luego de la medida del Banco Central de limitar esta compra a sólo el 40% (por lo que la provincia debería abonar por lo menos unos $6.000 millones más si llega a ir al dólar alternativo “bolsa”, o MEP). Hasta el momento, no se ha realizado ninguna acción.
No obstante, en un primer momento no fue la idea del Gobierno la de abonar este pago de la deuda en dólares tomada en 2016; sino que se especulaba con refinanciar los vencimientos de este año a través de un roll over, y contar con ese monto para otro tipo de uso, por ejemplo obras públicas.
Pero Suárez no envió el pedido de rolleo de las acreencias en 2023 a la Legislatura, y si bien emitió un decreto para iniciar la operación, luego fue desestimada por la Provincia al haber sido judicializado por el Partido Justicialista con un recurso a la Suprema Corte de Justicia (que aún no resuelve).
Más allá de estas consideraciones, el Gobierno manifestó que Mendoza está “en mínimos de nivel de deuda”, y puso énfasis en las “cuentas ordenadas”.
El bono verde mendocino
Por otro lado, Mendoza emitió la semana pasada un bono verde (Social, Verde y Sustentable) por $4.800 millones, con destino a la obra de extensión del Metrotranvía de Mendoza, Etapa III (desde Pellegrini hasta Parador Pueyrredón en Luján de Cuyo) y Etapa IV (desde Parador Avellaneda en Las Heras hasta Estación Aeropuerto).
En esta ocasión logró colocar $4.800 millones a 24 meses y a una tasa equivalente a Badlar +5,9%, que amortizará en 8 cuotas trimestrales.
Los títulos de deuda de carácter verde o social son cualquier tipo de bono en el que los fondos se aplican exclusivamente para financiar, o refinanciar, proyectos elegibles, con impacto ambiental o social positivo.
Este bono representa, tal como lo presentó el Gobierno, un “hito importante” para la Provincia de Mendoza, ya que, en la actualidad, “contemplar la sustentabilidad, las energías limpias y renovables y los efectos positivos sobre la sociedad son puntos por demás destacables, agregándose a la importancia que tiene la obra en si misma para potenciar el sistema de transporte del Gran Mendoza”.
La deuda local
El total de la deuda consolidada (sin deuda flotante) es de $44.817 millones más U$S 666 millones, tal como establece el stock de deuda de Hacienda a marzo del 2023. En moneda extranjera, representa un monto de U$S 880,44 millones (teniendo en cuenta un valor del dólar a $208,90).
El 63,93% de toda la deuda se tiene con bonistas (la gran mayoría en dólares); mientras que un 21,25% es con organismos multilaterales (BID y Birf). El resto es un 9,75% al Banco Nación; y un 5% al Gobierno Federal.
Por otro lado, el 75,6% de las acreencias están en dólares, mientras que el 24,4% es en pesos (en 2019 el 60% era en dólares, 16,4% en pesos ajustados y 23,5% en pesos).
Sin dudas esta porción en moneda extranjera ha ido incrementándose en la provincia conforme ha ido avanzando el proceso de devaluación del peso argentino, lo cual también ha sido motivo de críticas por parte del peronismo, quien en varias oportunidades ha expresado la disconformidad de la toma del bono en dólares en 2016.
Respecto al perfil de vencimientos (interés más capital), el 2024 será similar al 2023 si es que no hay refinanciamientos. Por ejemplo, este año cerrará con pagos por U$S 131,8 millones y $45.834 millones.
En tanto el año que viene baja el pago en moneda local, con $23.021 millones; pero el de moneda extranjera se mantiene en U$S 131,1 millones.
En 2025, por otro lado, se deberán abonar U$S 124,7 millones y $12.593 millones.