A bordo en un vuelo comercial, Javier Milei arribó esta mañana para una visita de pocas horas a la capital estadounidense, donde conservadores de todo Estados Unidos y algunos representantes de la derecha global se reúnen estos días en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC, siglas en inglés).
El presidente llegó luego de una escala en Miami con una delegación compuesta por su hermana y secretaria general Karina Milei y el futuro embajador en EE.UU., Gerardo Werthein, que obtuvo su aprobación de la Casa Blanca, pero aún espera ratificación de su designación en el Senado argentino.
También viajó Santiago Oría, quien se encarga de registrar todos los pasos del presidente y que posteó varias fotos que Milei se sacó con los tripulantes y pasajeros del avión. La comitiva se unirá en territorio estadounidense con la ministra de Seguridad Patricia Bullrich que ya disertó en este mismo foro el miércoles, el día de la inauguración, y luego mantuvo visitas con diversos funcionarios del gobierno de Joe Biden.
Cómo será la disertación de Javier Milei
El mandatario dará su discurso en un imponente hotel y centro de convenciones en las afueras de Washington, en el día final y el de máxima expectativa de la conferencia porque hablará Trump, que es un tradicional orador del foro. El expresidente de EE.UU. hoy está de nuevo en el centro de la escena porque busca volver a la Casa Blanca en las elecciones de noviembre.
En ese marco, el argentino es uno de los principales invitados internacionales, junto con el salvadoreño Nayib Bukele, la ex primera ministra británica Liz Truss y el líder de Vox Santiago Abascal. Según trascendió, Milei pronunciará su discurso alrededor de las 15 (las 17 de Argentina) y hablará poco después de Trump y del diputado Eduardo Bolsonaro, el hijo del ex presidente brasileño.
“Milei está enfocado en la lucha contra el socialismo y la corrupción en su nación. Creemos que ha capturado el espíritu de aquellos que ven la traición de las élites globalistas. Los patriotas estadounidenses lo están apoyando para que tenga éxito y también nos gusta la motosierra”, manifestó Matt Schlapp, presidente de la CPAC, cuando confirmó la asistencia del argentino.
Más allá de los halagos, el viaje a esta conferencia le resultó algo incómodo a Milei, de acuerdo a lo informado por Clarín. Esto se da por la posibilidad de un encuentro con Trump, el principal rival del presidente Joe Biden para la reelección. De hecho, varios periodistas le preguntaron en Buenos Aires el viernes al canciller Antony Blinken si la participación del argentino en el foro molestaba a la Casa Blanca.
Al respecto, el funcionario dijo diplomáticamente que “no puedo hablar de su agenda y de sus futuras reuniones. Eso, por supuesto, depende totalmente de él. De lo único que puedo hablar es de la reunión que acabamos de tener, y puedo decirles que fue, al menos desde mi punto de vista, una discusión increíblemente positiva, productiva, detallada y de amplio alcance”.
Entre Biden y Trump, Javier Milei
El presidente argentino ansía un encuentro con Trump, a quien admira por las ideas de su movimiento MAGA (Make American Great Again) y también por su estilo. Muchos en EE.UU. dicen que el libertario es un “mini Trump”, una idea que se hizo eco en su momento en nuestro territorio, aunque en sus ideas económicas difieren bastante ya que el estadounidense tiende a ser más proteccionista.
El magnate también ha puesto su atención en Milei y le ha dedicado varios tuits elogiosos luego de su triunfo. En el entorno de Milei saben que una foto con Trump podría incomodar al gobierno de Biden, por lo que han buscado bajar el tono de un posible encuentro diciendo que no lo viene a ver específicamente a él sino que viene a participar en la conferencia y que cualquier encuentro sería más bien “casual”.
Meterse en la interna de las elecciones estadounidenses, justo cuando Milei precisa respaldo de EE.UU. ante el FMI y para salir de la crisis, no es algo que le convenga al libertario, mucho menos a la Argentina. Más allá de su presentación internacional, que finalizará mañana cuando emprenda el regreso a Buenos Aires, Milei estará atento a los problemas locales, entre ellos la pelea con los gobernadores, encabezados por el de Chubut, en pie de guerra por los recortes a las provincias.