Tras el decreto de Alberto Fernández para que ocho departamentos de Mendoza vuelvan al Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), el gobernador Rodolfo Suárez se reunió esta mañana con los intendentes para analizar cómo avanzar en las próximas horas y aplicar las medidas restrictivas, a más de 200 días de aquel confinamiento y luego de un fin de semana en el que muchas familias mendocinas pudieron reencontrarse.
Los departamentos afectados por el regreso al aislamiento obligatorio desde el lunes 12 hasta el domingo 25 son Capital, Godoy Cruz, Maipú, Guaymallén, Las Heras, Luján, Tunuyán y Tupungato. El resto de la provincia continúa en fase de distanciamiento social.
Gustavo Soto, intendente de Tupungato, confirmó la reunión con el mandatario provincial y sus pares, aunque se mostró en contra de lo dispuesto por Fernández y las graves consecuencias sociales y económicas.
“Estoy muy molesto con esta medida porque no se nos escuchó, no se nos ha dado razón. Y la verdad que es un sinrazón de tantas que viene cometiendo el gobierno nacional”, expresó esta mañana en radio Nihuil.
“Sé que el Gobernador ha planteado la inconveniencia de esta situación. Porque solamente que salvo los primeros tiempos de la cuarentena, terminó de complicar la economía. Y no se ha solucionado el problema de la pandemia de la manera que se nos prometió”, evaluó Soto, en referencia a la decisión del Presidente.
“Aunque el sistema de salud está complicado, mucho más está la economía. No se puede soslayar una situación de la otra. Volver en algunos rubros es prácticamente que no abran más. Para mí es una equivocación. La sociedad ya no está dispuesta a aceptar este tipo de medidas y más cuando son sin una idea clara de a dónde se quiere ir”, advirtió.