Esta semana el Gobierno Provincial mantuvo una reunión importante con representantes de cámaras de la construcción, con el objetivo de intentar solucionar los problemas que tienen las empresas, relacionados con la crisis económica a nivel nacional, que ha afectado y derivado en una ralentización de obras y aumentos considerables en las ofertas presentadas, así como también las redeterminaciones de precios.
Pues bien, los municipios, que son los que en los últimos meses han apalancado en parte la obra pública en Mendoza, también han evidenciado estas complicaciones, con diversas situaciones según cada comuna.
No obstante, la preocupación por una complejización de la obra pública está latente en todas las administraciones, ya que han evidenciado que más que normalizarse el conflicto en las últimas semanas, se ha agravado, en una tendencia que va para peor hacia futuro.
A su vez, hay departamentos que han notado ofertas en licitaciones que han abierto en julio, con presupuestos por encima del 40% o 50% de lo analizado, así como también algunas que han quedado desiertas, ya sea porque empresas han decidido apartarse por un tema de costos, así como también porque no saben si conseguirán los materiales o insumos que se necesitan.
Mientras tanto, las cámaras empresarias aseguran que las comunas han tenido mayores herramientas para evitar la burocratización en lo que se refiere al pago y la vigencia de los precios de los materiales, aunque también sostienen que la crisis también ha impactado - y seguirá en esa senda- en el ritmo de los trabajos.
Gerardo Fernández, vicepresidente de la Cámara de Empresas Constructoras Independientes de Mendoza (Cecim), manifestó que la situación si bien es levemente diferente a la provincia, porque los pagos no tienen tanta espera, sí han tenido problemas con licitaciones municipales que tienen financiamiento nacional.
“Al ser todo más burocrático, las carpetas vuelven luego de 4, 6 meses, con valores completamente desactualizados. Pero fuera de eso, en la provincia se ha estado licitando y adjudicando”, consideró el empresario.
Situación complicada
Como se plantea, la situación es diversa según admiten o no los municipios. En el caso de Guaymallén, el intendente Marcelino Iglesias aseguró a Los Andes, por un lado, que su comuna está en el lote de los que “más obra pública hace, sobre todo en años no electorales como éste”. Manifestó también que “ese es el principal riesgo” que tiene, a diferencia de otras en las que “por la incertidumbre, hacen supervivencia ahorrando y aguardando a que aclare la situación”.
Iglesias expresó que no sólo se habla de aumentos desmedidos de precios de materiales, sino también de faltantes, a los que se suman los insumos y repuestos.
Como ejemplo, expresó que en Guaymallén han tenido varios meses máquinas, como motoniveladoras, sin funcionar porque no llegan las importaciones de repuestos, y que eso se traslada a las empresas constructoras, que tampoco consiguen otro tipo de máquinas como retroexcavadoras.
Además marcó que hay un problema en la provisión de asfalto, y que complejizará aún más la situación cuando llegue la primavera.
En tema de licitaciones, el Intendente expresó que se han encontrado con algunas que han quedado desiertas, como las de provisiones de materiales de herrería, o de compra de instrumentos de seguridad e higiene; y aseguró que el panorama que se ve no aclara a futuro.
En tanto, también se han visto “aumentos considerables” de ofertas de empresas. Una de ellas se abrió el jueves de esta semana, en la cual una empresa ofertó con un presupuesto mayor al 50% de lo que calculó el municipio. El mismo era de provisión de emulsión asfáltica por $7 millones, y la oferta fue de $11 millones.
“Tenemos una incertidumbre total. No sabemos si vamos a poder encarar las obras que estamos licitando. En breve llamaremos a una por unos $300 millones para construir un centro cívico, con un jardín maternal, un playón deportivo y una delegación en Puente de Hierro. Nos pidieron prórrogas las empresas pero la situación está compleja”, comentó.
Desde Capital, Juan Manuel Filice, secretario de Desarrollo Urbano, comentó que están “muy preocupados” por la falta de valores en los materiales; y advirtieron que “en casi todos los casos las empresas han presentado valores muy elevados en relación al presupuesto oficial”, y que incluso en una ocasión “la duplicaron”.
Para Filice, esto en parte podría tener una explicación. Por un lado, las fórmulas de redeterminación de precios “no terminan de ajustar lo que ellos pretenden ajustar, por lo que las empresas también están preocupadas”. En tanto, los pliegos se presentan entre 30 y 45 días luego del análisis de costos, por lo que hay también una diferencia de precios.
Si bien han tenido licitaciones desiertas, no son los mayores casos; pero sí marcó que las que reciben son entre un “20 y 30% sobre el presupuesto oficial”. Ante todo este combo de situaciones, analizan pagar antes las certificaciones de 60 a 45 días.
Mejor panorama, pero en alerta
Sin mayores problemas se manifestaron desde San Rafael, quienes comentaron que la obra pública “no ha sufrido ralentización y continúa avanzando en barrios y distritos”. No obstante, expresaron que se están preparando para recibir pedidos de “mayores costos por parte de las constructoras”.
Con el tema licitaciones, expresaron que si bien no han quedado desiertas, “hay ofertas por encima del presupuesto oficial de entre un 10 y 20%”.
Sí también advirtieron que en base al contexto actual, hay proveedores que han presentado inconvenientes para entregar bienes o servicios requeridos por el municipio, y que han aludido “a dificultades para conseguir productos en el mercado o con valores que se exceden al presupuesto inicial”.
En Las Heras, el secretario de Obras Francisco Lo Presti, dijo a Los Andes que todas las obras las tienen en ejecución y que incluso “se ha aumentado el ritmo de obras”.
“Todo lo que es compra de materiales lo hacemos a comienzo de año, por lo que no hemos tenido problemas hasta el momento”, comentó.
No obstante, trabajan para adecuar las licitaciones que se realizarán a fin de año, para que comiencen en el 2023. “Estamos analizando estos inconvenientes porque sabemos que la situación no es la mejor; no queremos tener problemas de precios, por lo que estamos estudiando la mejor manera de establecer propuestas que no bajen el ritmo de obra y que le convengan a Las Heras”, agregó.
En tanto, Esteban Allasino, jefe de Gabinete de Luján, dijo al igual que Lo Presti que vienen bien con el ritmo de obra, pero sí han notado algunas demoras puntuales por escasez de combustible, que ya ha sido solucionado.
Añadió también que están trabajando en una “batería de proyectos” para licitar y marcó que les alarma “la falta de recursos y también la alteración de precios”.
“Nosotros estamos trabajando con la mayor seriedad; esperamos que el mercado y las empresas también lo hagan. Pero no dejamos de estar preocupados por lo que se ve día a día”, opinó.
En Godoy Cruz manifestaron que por el momento la situación es estable, y si bien expresaron que no han tenido inconvenientes en licitaciones o en el avance de obras; sí han visto con cuestiones vinculadas a la informática y compra de materiales, por el tema precios e insumos.
En ese rubro, algunas licitaciones de insumos que se realizaron luego de la salida de Martín Guzmán del ministerio de Economía, fueron dadas de baja porque las ofertas llegaron con un aumento mayor al 40% del presupuesto original.