“El paro les dolió”, resumió Pablo Moyano cuando se le preguntó sobre los calificativos disparados contra la CGT desde el gobierno. Ayer se cumplió el segundo paro nacional contra las políticas del presidente Javier Milei. El oficialismo le apuntó a los sindicalistas, a los que se acusó de “extorsionadores” y “mafiosos” y se buscó minimizar su grado de representación.
Ante imágenes de avenidas, aeropuertos y estaciones de trenes desoladas, en Casa Rosada se dijo que era “difícil” medir el acatamiento al paro porque “se le impidió a la gente a llegar a sus trabajos”. Para la CGT la “contundencia” del paro expresó “el hastío de la gente”.
“Cuando nos dicen que es un paro es político, efectivamente, estamos discutiendo el rumbo de nuestro país y discutiendo todas las acciones que vienen dañando el entramado social del país”, evaluó Daer en conferencia de prensa.
Moyano dejó su propia evaluación. “(Al gobierno) la gente lo juzgó hoy; las movilizaciones cada vez son más masivas. Muchos de los que hoy pararon lo votaron (a Milei)”, valoró el dirigente camionero y salió al cruce del ministro de Economía, Luis Ca-puto, quien se había solidarizado los trabajadores “que no pudieron llegar a sus trabajos” culpa del paro. Moyano lo acusó de “afanarse” el préstamo del FMI durante la gestión de Macri.
“Gracias Pablo por tus continuos insultos. Son bienvenidos, ya que vos sos todo lo que ningún argentino de bien quiere ser. No representás a nadie. Sos un mero matón al que el país entero detesta”, respondió Caputo El mensaje del ministro fue replicado por el presidente.
Horas antes Javier Milei había dado su propia opinión sobre el paro en dos tuits de la red social X. “Nota de color... ¿Saben cómo se dice Faraón en hebreo? Les cuento... PARO. A buen entendedor, palabras bastan...”. Luego escribió: “Les dejo otro dato de color. ‘Paro’ también significa desnudez y descubierto. Por lo que ello significa que aquellos que promueven el paro han quedado al desnudo, revelando el tipo de personas que son...”.
La ministra Patricia Bullrich también se sumó a las críticas contra los sindicalistas. “Arrancó la mafia. No dejemos que rompan todo lo que estamos logrando. Nosotros vamos a cuidar a todos los que vayan a trabajar. Llamá al 134 y denunciá”, informó.
Daer dijo que no contestaría las agresiones verbales del diputado José Luis Espert, que había calificado a la CGT de “sindigarcas”.
El paro general fue impulsado por la CGT, y también por las dos CTA, de mucha influencia en las dependencias públicas. La huelga en las distintas ramas del transporte arrojaron escenas de desolación en las estaciones de Once, Constitución o Retiro. Las imágenes remontaron a los tiempos de la pandemia y la cuarentena.
La CGT comparó el desplome económico de la pandemia con los re-cientes índices del gobierno de Milei, con una caída del 42 por ciento de la construcción y del 21 por ciento promedio en la industria. “Estas son algunas de las razones que explican la contundencia del paro”, dijo Daer.
La CGT le pidió al gobierno “tomar nota” del paro. “Si no hay cambios vamos a seguir con las medidas de acción directa”, pronosticó Andrés Rodriguez, titular de UPCN, uno de los sindicatos de estatales. “Hoy no hubo trabajadores en las oficinas públicas”, afirmó Rodríguez. En el área docente, la CGT estimó un cumplimiento del paro del 90 por ciento en todo el país.
Los despidos en el Estado, la privatización de empresas públicas, la caída del salario y jubilaciones, los cien mil puestos perdidos en la construcción y la defensa de los derechos laborales integran la agenda de la CGT. La central obrera ahora hace foco en la Ley Bases que se está discutiendo en el Senado. No se descarta que la CGT se movilice cuando el proyecto sea votado en el recinto.
“Esto es para que lo escuchen los senadores. Hay 409.000 empresas que tienen en la formalidad menos de 5 trabajadores y la cantidad de esos trabajadores suma 600.000. Con este proyecto de ley, estos 600.000 trabajadores pasan a la in-formalidad”, explicó Daer.
Para el “después del paro”, la CGT anunció que continuará el diálogo con los senadores para que rechacen la Ley Bases: “Hoy no hubo dictamen como quería el gobierno. La semana que viene vamos al Senado a hablar de ganancias y del RIGI, que pone en peligro a la industria nacional”, adelantan en la CGT.
La ministra Bullrich, en tanto, dijo que en “los próximos meses (la situación) va a ir mejorando porque la inflación está bajando”.