Desde que la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) empezó a pisar fuerte en la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, recrudecieron los conflictos. En los últimos días, el enfrentamiento ha alcanzado relevancia nacional y en la provincia, el fuego entre los principales partidos mayoritarios no cesa.
Guillermo Carmona, presidente del Partido Justicialista (PJ) y la Unión Cívica Radical se tiraron con munición gruesa mientras en el medio están los empleados que trabajan en el municipio que conduce el oficialista Ulpiano Suárez.
“Basta con ver los bonos de sueldos que exhiben para comprobar que trabajar allí, en el Municipio más rico de Mendoza, es sinónimo –para la mayor parte del personal- de indigencia y pobreza. Las acciones que han adoptado esos trabajadores y sus representantes sindicales se han desarrollado en el marco del ejercicio de derechos fundamentales garantizados por nuestro régimen constitucional: el derecho de reunión, el derecho de peticionar a las autoridades y el derecho de huelga”, sostuvo Carmona vía Facebook.
Desde la Unión Cívica Radical emitieron un comunicado repudiando “la violencia de ATE que bajo el disfraz de un falso reclamo sindical intentan sabotear las buenas gestiones que no son afines al Gobierno Nacional”. Además, afirman que “estos son, los nuevos soldados serviles a la Cámpora y al Kirchnerismo, que unidos por el odio y la venganza a quienes no los votaron quieren a Mendoza y su Capital de rodillas”.
“No deja de sorprendernos la alianza sindical opositora que busca, una vez más, tomar de rehén a la ciudadanía mediante la violencia y el atropello a las instituciones de la democracia. Parece que aquí también quieren hacer pagar a los vecinos de Ciudad el precio de no haberlos votado”, fustigan.
Los hechos
La semana pasada ATE denunció represión en el desalojo de las instalaciones municipales. “En la noche llegaron cientos de policías e infantería dónde los trabajadores estaban haciendo retención de tareas. Los dispersaron y a algunos los fueron a buscar a sus casas”, explicó el titular de ATE, Roberto Macho.
Carmona acusa a Ulpiano Suárez de “victimizarse” y que ha distorsionado “los hechos e intentando atribuir a acciones político partidarias lo que no es otra cosa que el resultado de una brutal política hacia el personal municipal”.
“Hablan de una supuesta represión pero no fue así. Al contrario hubo agresiones a empleados municipales y daños a bienes. Además, entorpecieron la prestación del servicio. Yo planteo que ATE se ha transformado en le brazo sindical de La Cámpora y del kirchnerismo”, remató el jefe comunal.
El titular del justicialismo provincial le envió una nota al intendente por la situación de los municipales y asegura que “no sólo no fue escuchado ni respondido” sino que “se produjeron nuevos actos de represión de inusitada gravedad y se inició la campaña de desacreditación de quienes expresamos solidaridad con la situación de los trabajadores y peticionamos por la apertura de canales para resolver la crítica situación por vías institucionales”.
El radicalismo pide recordar lo sucedido en uno de los últimos actos públicos del hoy gobernador Roolfo Suárez. “Estos ataques comenzaron en la provincia en septiembre de 2019 cuando en plena inauguración de la Plaza España, la patota de ATE con Roberto Macho a la cabeza agredió e insultó al Intendente y candidato a Gobernador Rodolfo Suarez”.
“Aquí no hay hechos aislados, todo es parte de un mismo plan, Portezuelo del Viento, Vicentín, Presupuesto, Roll Over, Coparticipación, Ayuda Nacional, IFE, ATE. El mandato partidario opositor está detrás y al frente de cada una de estas acciones, donde lejos de aportar al diálogo y al consenso generan enfrentamientos en momentos donde la ciudadanía pide unión y respeto”, concluyen.