El presidente Alberto Fernández presentó hoy el proyecto de Ley de Compre Argentino que el Gobierno elaboró con el sector empresario y los sindicatos y señaló que, tras la derrota electoral del domingo, el confía en que “no se altere” el camino iniciado en 2019.
“Yo confío en que este camino que iniciamos en 2019 no se altere. En lo que a nosotros concierne no se va a alterar”, dijo el jefe de Estado al defender la lógica que lleva adelante el Frente de Todos en su política económica.
Señaló que el anuncio de este lunes responde a que la ley de compre nacional de 2018, impulsada por el macrismo, no funcionó y fue sólo retórica. Y agregó que el principal objetivo de su gobierno es la generación de empleo privado formal.
El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, señaló que para este año se habían anunciado en la Asamblea Legislativa de marzo seis proyectos de ley para buscar la transformación de la estructura productiva nacional, para poner el eje en el trabajo argentino.
Dos de esos proyectos ya fueron enviados al Congreso: nuevo marco regulatorio para el desarrollo del cannabis medicinal y del cáñamo industrial en el país; y el que impulsa la industria autopartista nacional para las terminales radicadas en Argentina.
La Ley de Compre Argentino es el tercer proyecto que se envía en el año al Congreso. E indicó que prevé que esta ley impulsará la creación de 30.000 nuevos empleos privados: generará 40.000 millones de pesos adicionales de inversión en investigación, desarrollo e innovación al año; y provocará un ahorro de divisas por unos 300 millones de dólares al año.
Kulfas añadió que en el mundo hay “una sobrada experiencia” respecto de la relevancia que tiene el poder de compra de los Estados para fomentar el desarrollo productivo, industrial y tecnológico. Y citó el Buy American, de los Estados Unidos.
En la Argentina las compras públicas explican el 13% del Producto Interno Bruto (PIB). “Impsa es una empresa nacional que se desarrolló, entre otras cosas, con el avance del proyecto del plan nuclear en otro momento histórico del país”, dijo.
La gestión de Fernández entiende que la Ley actual (27.437), sancionada en 2018, tiene “grandes limitaciones” para que el Estado pueda utilizar su poder de compra como herramienta para el desarrollo.
Datos oficiales indican que el 65% de los proveedores del Estado son empresas privadas nacionales. Y el 97% de esas empresas proveedoras son PyMES. Esto refleja, según la Casa Rosada, la importancia del impulso de las compras públicas nacionales como herramienta estratégica para el desarrollo local.
La visión del empresariado
El presidente de la Cámara Argentina de Industrias Electrónicas, Electromecánicas y Luminotécnicas (CADIEEL), José Tamborenea, expresó que el sector está convencido que la iniciativa permitirá avanzar en el desarrollo industrial y tecnológico de la Argentina.
“Anoche me quedé a escuchar el cierre lo que usted mencionaba sobre escuchar. Esta ley proviene de haber escuchado, de los oídos que nos han prestado los secretarios y el ministro, de haber compartido tiempo y espacio para poder articular algo coherente y de largo plazo”, dijo el empresario.
Y agregó: “Cuenta con todos los industriales para este apoyo, nosotros estamos convencidos que esta es la vía del desarrollo. Y podemos manifestar que si esto no está llegando a la gente, sí está legando a nuestras fábricas. Nosotros estamos empezando a recuperar el empleo y las productividades. Si logramos de alguna forma articular nueva productividad, con competencias y hacer de esto mayor competitividad vamos a poder exportar y reconvertir algo que se merece el país entero sin importar a quien le toque gobernar. Pero cuenta con todo el apoyo de la industria para llevar esto adelante”.
El aliento de Caló a Fernández
Antonio Caló, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica, dijo que su sector apoya la iniciativa y habló del contexto electoral, parado desde el lugar como dirigente con raíz peronista, golpeado por lo que expresaron las urnas.
“Tus palabras de anoche a mí me llegaron mucho”, le dijo Caló a Fernández. “Más allá de una elección de medio término, hoy estamos trabajando y pensando para que el país vaya para adelante, para que haya cada vez más puestos de trabajo. Creo que tenemos que poner el eje, gobierno, trabajadores y empresarios, en que se sale con producción y trabajo”, expresó el sindicalista.
El espíritu de la ley
Fernández dijo que la ley refleja el espíritu y el sentido del gobierno, dado que para el Frente de Todos “gobernar es crear trabajo”. “Y para que el trabajo se cree lo que más necesitamos es que haya gente que invierta, arriesgue, produzca, demande trabajo y de ese modo se genere lo virtuoso del capitalismo”, agregó el Presidente.
En ese sentido señaló que su gobierno seguirá generando medidas y leyes para impulsar a la industria nacional. Afirmó que hay que prestarle particular atención a las pequeñas y medianas empresas para que no queden “desvalidas” como en otros momentos de la historia del país. Y destacó el rol de las grandes compañías como impulsoras de las cadenas de valor.
Fernández pidió no caer en el “error” de pensar que de este modo se está dejando de lado la libre competencia. “Insisto: creo que el mercado debe funcionar en libertad pero con reglas que un Estado arbitre. Y creo por sobre todas las cosas que nada es más importante que el desarrollo de la industria argentina, del desarrollo argentino”, dijo.