El ministro de Salud y Deportes, Rodolfo Montero ofreció explicaciones a los legisladores sobre tres proyectos del Plan Provincial de Salud 2024-2030 presentado por el gobernador Alfredo Cornejo.
Durante la exposición, el ministro respondió a las consultas tanto de la oposición como del oficialismo, mostrándose receptivo a incluir modificaciones con el fin de alcanzar una reforma consensuada. Montero destacó el objetivo legislativo inicial de lograr unanimidad en ambas cámaras a la hora de votar.
El proyecto más debatido fue el de la modificación de la Ley de Residencias Médicas que busca sumar residentes en áreas críticas. Los otros dos proyectos analizados fueron los relativos a la necesidad de establecer un Consejo Asesor de Salud que articule políticas públicas entre los diferentes actores del sistema de salud.
Y por último, se planteó la implementación de una planificación estratégica para los próximos seis años, que involucre a todas las autoridades ministeriales presentar y debatir públicamente sus objetivos y rendir cuentas anualmente sobre su cumplimiento.
“La idea es discutir las leyes una a una y que el tratamiento vaya siendo por ley o por grupo de leyes, por ello venimos a explicar las primeras tres y trataré de estar presente las próximas jornadas”, expresó el ministro. En este sentido, sostuvo que les harán llegar los datos que sean necesarios a los legisladores para que puedan debatir con la información en la mano.
Adriana Cano, senadora provincial por el peronismo, antes de la presentación, reiteró: “No encontramos en ninguno de los artículos de este paquete de leyes respuestas concretas a la atención de mendocinos y mendocinas que se atienden en los centros de salud. No solo no tienen profesionales sino que tampoco el sistema de administración de la salud. Vamos a seguir insistiendo en que estos temas deben debatirse”.
RESIDENCIAS
Las consultas de los legisladores se centraron principalmente en la Ley provincial de Residencias Médicas (7857), que pretende hacerlas más atractivas y alineadas con las necesidades del sistema de salud.
El ministro explicó que con la modificación a la Ley 7857, lo que se busca es “mantener la calidad, hacer la residencia por competencia, reducir el plazo, reducir la carga horaria semanal, mejoramos el tema de licencia, mejoramos los descansos post guardia, permitimos que se remunere más a las especialidades que estén en falta”.
El senador del Partido Justicialista (PJ), Félix González, fue uno de los primeros en plantear la problemática que atraviesa al conjunto de médicos residentes, que se da tanto en los hospitales públicos como privados. La reforma de salud no cambia el status de “proceso de formación” a las residencias, sino que los mantiene como una especie de becarios. Pero la lupa está puesta en las condiciones de los residentes.
“Está muy bien el concepto de que no es trabajo, es un proceso de formación. Pero el problema es qué pasa efectivamente en los hospitales. Hay que ver si los residentes no son los que terminan haciendo el trabajo que nadie quiere hacer, y en consecuencia explotados”, explicó a su tiempo el senador del peronismo.
Lo que planteó el peronismo es que el Gobierno “hace un análisis de la cantidad de residencias que se pierden porque no las quieren tomar por la cantidad de años de trabajo que implican, o lo que sea. Sin embargo, hay que hacer un análisis más exhaustivo a los fines de saber por qué no se toman. Si es solamente un problema de duración o es también un problema de recursos”.
El senador peronista, en diálogo con Los Andes, explayó su punto de vista sobre las condiciones en las que los médicos residentes toman este proceso formativo: “Lo que ellos están planteando es que como es una beca, refuerzan el concepto de que es un proceso de formación, entonces le ponen un valor nominal a la retribución”. Esto es porque de acuerdo a lo que se desprende de los proyectos presentados, los médicos residentes pasarán a cobrar en unidades sanitarias, que se fijarán por decreto del Gobernador.
Precisamente que no esté definida la retribución que van a tener los médicos residentes es lo que preocupa al peronismo local. “Definan cuál es el monto de la unidad sanitaria o definan un anclaje para esa unidad sanitaria, porque sino el Ejecutivo va a sacar un decreto y va a decir cuánto vale la unidad sanitaria”, le pidió el senador González al ministro Montero
Y en modo de consejo advirtió: “Cuando no hayan recursos, el Estado provincial te va a decir (en referencia al ministro de Salud), te bajo la unidad sanitaria y listo. No hay ningún anclaje legal”.
Hay que tener en cuenta que, en la actualidad, un residente hace ocho guardias al mes; trabajan de lunes a viernes de 8 a 17 horas, mientras que los sábados de 7 a 14 horas. De acuerdo a Roberto Macho, secretario general de ATE, un residente médico está cobrando, en los últimos años, un promedio 400.000 pesos al mes.
A su vez, Claudia Iturbe detalló que esto depende de la clase: “El primer año es clase 1, el segundo año es clase 3, el tercer año es clase 5 y el jefe de residencia es clase 7. O sea, están casi a un nivel de un profesional que tiene 17 años de antigüedad, de clase 7″.
Montero sentó su postura sobre este tema y destacó: “Como es una beca lo que buscamos con esta modificación es tener la facultad de establecer distintos montos, de acuerdo a si son determinadas especialidades con baja oferta o determinados lugares”. Sandra Gómez, directora de Recursos Humanos del ministerio de Salud y Deportes, completó: “Los residentes tienen que ir a aprender y la forma de aprender en medicina es practicando”.
Luego, uno de los legisladores oficialistas que pidió la palabra fue el senador provincial representante de Junín, Mario Ana, quien le planteó al ministro, aprovechando la modificación que le otorga cierta flexibilidad al Ejecutivo para establecer la retribución económica de los médicos residentes, la posibilidad de incluir incentivos económicos a aquellos médicos residentes que realicen su proceso formativo fuera del Área Metropolitana de Mendoza.
CONSEJO PROVINCIAL DE SALUD
José Luis Ramón, también pidió la palabra y, entre otras cosas, planteó la posibilidad de incluir dentro del Consejo Provincial de Salud a un representante de la sociedad civil que sea usuario del sistema de Salud, a fin de comprender cuáles son las problemáticas que tienen quienes usan el servicio. De acuerdo al proyecto de ley solamente están comprendidos los “financiadores, prestadores, organizaciones, cámaras, sociedades científicas y entidades gremiales”.
Montero explicó que es algo que tuvieron en cuenta al momento de redactar el proyecto de Ley, pero que no pudieron encontrar quién puede tener la suficiente representatividad para sentarse en la mesa y hablar en nombre de los usuarios del sistema de salud. Sin embargo, les pidió a los legisladores sugerencias sobre este tema afín de incluir a más actores de la sociedad dentro de este Consejo.
PLAN DE SALUD
Tanto la oposición como el oficialismo se mostraron conforme con el proyecto que “establece la obligación para las autoridades del Ministerio de presentar planes estratégicos con horizonte temporal de 6 años”.
Este plan de acuerdo al texto de la ley debe contener: “un análisis del sistema sanitario provincial y de las principales variables epidemiológicas y sociodemográficas de Mendoza que condicionan el estado de salud de la población, y debe fijar las principales líneas estratégicas con definiciones acerca de las medidas prioritarias para dar cumplimiento”.
Hubo una sugerencia por parte de un legislador de La Unión Mendocina (LUM), Ariel Pringles, de acortar el plazo de seis años a cuatro, para que cuando llegue un nuevo ministro tenga la posibilidad de establecer los objetivos para su propia gestión, y no retomar los de otros ministros. Montero explicó que, si bien están abiertos para escuchar sugerencias, es un plazo necesario para fijar objetivos a mediano y largo plazo.