La Empresa Mendocina de Energía (Emesa) abrió el concurso para realizar los estudios de geología, geotecnia, geofísica, ensayos de laboratorio y topografía del Aprovechamiento Hidroeléctrico El Baqueano, que estará situado sobre el río Diamante, en San Rafael. Durante el año pasado, esta obra se mencionaba como el plan B, en caso de que Nación no permitiera avanzar con Portezuelo del Viento.
Sin embargo, fuentes oficiales sostienen que la idea es tener proyectos listos para hacer un dique cada cinco años. En este caso, el plan es arrancar con la construcción de El Baqueano una vez concluido Portezuelo del Viento. “El proyecto de la represa de Malargüe nos llevó 4 años de estudios”, dicen.
La nueva represa, que sumará 150 megavatios de energía limpia al sistema interconectado nacional, fue proyectada en la década del 80 y completa el proyecto original de diques diseñado para el río Diamante por la ex Agua y Energía Mendoza.
Hace 40 años se pensó como una presa de materiales sueltos con cara de hormigón aguas arriba, como Potrerillos, en la confluencia entre el arroyo Agua de la Mora y el río Diamante. Pero antes de reactivar la obra, el Gobierno de Mendoza encaró nuevos estudios, que determinaron que aguas arriba del sitio previsto había riesgo de desplazamientos de laderas.
Así, se determinó que la histórica propuesta de Agua Mora quedaba descartada y que se construirá una presa de hormigón de gravedad HCR (hormigón compactado con rodillos) en una zona conocida como El Imperial.
Ahora, antes de iniciar el proyecto ejecutivo final, se deben llevar adelante estudios que permitan ajustar los últimos detalles de ingeniería para una obra que tendrá, entre otras cosas, el túnel más largo de Argentina, que llevará el agua hasta la sala de máquinas. Los mismos se concretan gracias al Fondo Fiduciario del Plan de Infraestructura Eléctrica de Alta Tensión de Zonas Aisladas y en Desarrollo (FOPIATZAD).
“Estos estudios lo que hacen es complementar los que existían previamente, ya que subsisten algunas dudas geológicas”, detalló Luis Lemos, jefe de proyectos hidroeléctricos de EMESA.
Cabe recordar que la cordillera de Los Andes es una zona geológicamente “joven”, por lo que los análisis de suelo previos para este tipo de construcciones deben ser minuciosos y actualizados.
“En los 80, Agua y Energía había realizado estudios superficiales y sobre la casa de máquinas -donde están las turbinas-. Ahora vamos a estudiar la zona de la presa y la traza de un túnel de 14 kilómetros que llevará el agua hasta la casa de máquinas, que se ubicará en la ‘cola’ de Los Reyunos”, explicó Lemos y aclaró que “se cerró un convenio con Vialidad Provincial, que hizo la apertura de los caminos para llegar al sitio y refuncionalizó un túnel de 500 metros que estaba desmoronado”.
En este sentido, Lemos detalló que los estudios llevarán unos seis meses y, una vez finalizados, se podrá ajustar la ingeniería básica.
La represa, que producirá 150 megavatios, concretará el plan original que se tenía para el Río Diamante y traerá como beneficios: energía para el Sistema Interconectado Nacional (SADI), con una potencia capaz de cubrir los picos de demanda; creación de un polo turístico, y atenuación de crecidas extraordinarias.
Las empresas interesadas en presentarse al concurso deberán solicitar a Emesa el pliego desde el día 28 de junio hasta el 8 de julio. En tanto, la presentación y apertura de ofertas se hará el día 23 de Agosto de 2021.
