Ricardo Quintela, gobernador de La Rioja y candidato a la presidencia del Partido Justicialista (PJ) Nacional, quien libra una interna con Cristina Kirchner, culminó su gira en la provincia de Córdoba en busca del voto de los afiliados cordobeses. De cara a la disputa electoral que se celebrará el próximo 17 de noviembre, Quintela afirmó: “Yo no me bajo”.
“Esperemos que los afiliados cordobeses nos apoyen”, dijo el mandatario, en su visita a la planta de mosaicos Blangino de Monte Cristo. Se trata de la misma empresa que en 2023 fue escenario del lanzamiento de campaña de Sergio Massa en Córdoba para su candidatura presidencial. En la industria de pisos y premoldeados firmó un acuerdo para que se recepten los “Chachos”, la cuasimoneda riojana que el gobernador lanzó este año.
Qué dijo sobre la interna con CFK
“El 17 de noviembre no es una pelea, es una competencia de dos propuestas, una que encarna Cristina Fernández de Kirchner y otra que encarna Ricardo Quintela para que el afiliado pueda elegir”, dijo.
“No existe la posibilidad de que yo me baje”, recalcó ante la consulta de los medios. Sobre la disputa intestina en el PJ mencionó: “Ella es banca (CFK) y yo soy punto, pero yo creo que podemos dar una sorpresa”, concluyó. En ese sentido le pidió el voto al afiliado cordobés. Quintela dejó en claro que vino a Córdoba, un electorado reacio al kirchnerismo, sin intentar comprometer ni buscar una foto con el gobernador de Córdoba Martín Llaryora.
El gobernador de La Rioja también habló sobre el funcionamiento de los “chachos”, un instrumento financiero implementado en su provincia como bonos de cancelación de deuda.
Quintela destacó que en Córdoba se aceptan los “Chachos” de la misma manera que se aceptan los pesos.
Además, explicó que en La Rioja estos bonos tienen un interés de ganancia; si se cambian en diciembre, el beneficiario recibirá un 17% más de su inversión inicial. El gobernador también subrayó que los Chachos son aceptados por todos los comercios, industrias y servicios en La Rioja, incluyendo los básicos como las tarifas agua, luz y gas, así como empresas de prepago.
“Yo tomé la decisión para que el poder adquisitivo del empleado público no cayera”, mencionó.
Gustavo Gómez, gerente de Blangino, dijo que el acuerdo con La Rioja por los “Chachos” surge ante “la caída del consumo y la crisis que vive el sector más golpeado que es la construcción, hace un tiempo que viene pensando en ayuda y financiamiento de obra pública para municipios y proyectos de inversión pública”. “Quintela se interesó en conocer la problemática de la industria y en ese marco se dio la visita”, añadió.