Finalmente el gobierno nacional decidió que el Ejército intervenga en el plan diseñado para combatir las bandas criminales asentadas en Rosario. Según anunció este mediodía el presidente Alberto Fernández, el Ejército no aportará efectivos para el patrullaje diario o la represión del delito, sino que colaborará con su cuerpo de ingenieros en el mejoramiento de la infraestructura barrial. El plan contempla desplegar en Rosario fuerzas de seguridad de la Nación hasta llegar a los 1400 efectivos, la instalación en la ciudad de 600 cámaras de vigilancia con la tecnología de “reconocimiento facial” y la apertura en Santa Fe de una delegación de la Unidad de Información Financiera (UIF) para combatir el lavado de activos.
“Rosario nos necesita. Sé que sus fuerzas de seguridad son insuficientes para afrontar la solución del problema”, dijo el Presidente en un mensaje grabado desde la residencia de Olivos, en el que anunciaron cinco medidas para combatir el crimen organizado y el narcotráfico.
La respuesta del gobierno nacional ocurre a casi una semana de los disparos en Rosario contra un supermercado propiedad de Roccuzzo, suegro de Lionel Messi, y del crimen, el domingo, de Máximo Jerez, un niño de 11 años que recibió un disparo en la espalda durante el festejo de cumpleaños en la vereda de un kiosco en el barrio Los Pumitas, en el noroeste de Rosario. Según datos oficiales, hubo 54 homicidios (cuatro de ellos niños) en 66 días.
“La lucha contra el crimen organizado, a pesar de los esfuerzos realizados, no ha alcanzado los resultados que esperábamos”, reconoció el presidente en el mensaje. La gravedad de la situación en Rosario y cierta conmoción en la opinión pública apuraron la batería de medidas anunciada por el Presidente.
Alberto Fernández recordó que las Fuerzas Armadas colaboraron “en la pandemia y en los incendios” con “tareas subsidiarias contempladas en la Ley de Defensa Nacional”.
“Son las Fuerzas Armadas de nuestra democracia”, definió. Dijo que ordenó que el Ejército Argentino, a través de su Compañía de Ingenieros, participe “en la urbanización de barrios populares, acelerando tareas pendientes de ejecución”. En el gobierno apuestan al peso simbólico que supone la presencia del Ejército en los barrios rosarinos, aún cuando su desempeño se restrinja a “tareas de logística”.
Alberto Fernández también prometió “el refuerzo de las Fuerzas Federales hasta alcanzar, en esta etapa, los 1.400 efectivos disponibles para la ciudad de Rosario”. El intendente rosarino, Pablo Javkin, y el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, habían reclamado más ayuda federal, sobre todo, en lo que llaman “el territorio”.
Se anunció, además, que hoy Omar Perotti, “firmará con la Unidad de Información Financiera (UIF) el convenio para instalar una delegación en Rosario”, de manera de “tener una mayor eficiencia en la lucha contra el lavado de activos, derivados entre otras causas, del narcotráfico”.
La decisión fue confirmada por el gobernador Perotti, que destacó que será desde la oficina de la UIF en Rosario “donde se ponga especial hincapié en la pata financiera, en el esquema de financiamiento de estas organizaciones”. Alberto Fernández recordó que el Gobierno nacional ya firmó con la provincia de Santa Fe otro convenio para validar las identidades a través del Sistema de Identificación Segura “con rapidez y celeridad en operativos de seguridad”.
Otra acción anunciada fue el despliegue de cámaras de seguridad en las calles rosarinas. “También sumaremos rápidamente 600 cámaras de vigilancia con reconocimiento facial de última generación para la ciudad de Rosario”, dijo Fernández.
Se prometió, además, que “se extremará la custodia de los reclusos que han sido condenados y pretenden desde la misma cárcel seguir controlando sus objetivos criminales”.
El presidente informó que mañana estará en Rosario el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, para supervisar el inicio del operativo.
El gobernador Perotti destacó los anuncios. “Creemos que son todas herramientas que nos tienen que ayudar a superar esta situación, a mejorar el cuidado de la gente de Rosario, pero sobre todo, a que se entienda que estas cosas no pueden pasar en el territorio de la Nación”, dijo el gobernador esta tarde, desde Expoagro 2023, en la ciudad bonaerense de San Nicolás. Perotti contó que en los últimos días habló “mucho” con el presidente Fernández y que esperaba más ayuda nacional desde que la semana pasada Alberto Fernández reconociera que “algo más habrá que hacer” para afrontar el narcotráfico en esa ciudad santafesina.
Perotti confirmó que mañana recibirá al ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, para que “la presencia federal esté mucho más firme en el territorio”.
Patricia Bullrich, precandidatura presidencial del PRO y exministra de Seguridad durante la presidencia de Mauricio Macri, no quedó conforme con el anuncio del Gobierno. “Costó, pero reconocieron el problema”, dijo en las redes sociales, pero agregó: “ahora la solución no tiene que ser tibia”.
Bullrich exigió un nivel mayor de involucramiento del Ejército, más allá de las tareas de urbanización que anunció el Gobierno naconal. La titular del PRO quiere a las tropas en la calle, acción hoy vedada por la ley. “En Rosario se precisan fuerzas federales y el Ejército para impedir la libre circulación de narcos y sicarios. No es prioridad construir casas, sino evitar que sigan masacrando a los rosarinos”, exigió Bullrich.
En su mensaje, Alberto Fernández cuestionó “el juego político que hacen algunos para sacar provecho de la situación” y acusó a la oposición por la “manipulación informativa con el propósito del desgaste institucional”.