Se abre otro frente de batalla en el Congreso. Mientras se define la suerte de la “ley ómnibus” en la Cámara de Diputados, en el Senado el interbloque de Unión por la Patria pidió una sesión especial para el próximo jueves 1 de febrero a las 14 con el fin de tratar el DNU 70/2023 firmado por el presidente Javier Milei.
El pedido de sesión fue firmado por el líder de la bancada, José Mayans, y sus pares Anabel Fernández Sagasti, Juliana Di Tullio, Juan Manzur y Sergio Leavy. Los senadores formalizaron la solicitud alentados por el paro y movilización de la CGT.
Los legisladores buscan poner en aprietos al oficialismo, dirigido en el Senado por Victoria Villarruel, luego de que se dilatara el tratamiento del DNU en la Comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo, que ni siquiera se constituyó porque no están nombrados los integrantes por parte de la Cámara de Diputados.
La mora se debe a que Unión por la Patria reclamaba cuatro lugares de los ocho a repartir, pero el titular del cuerpo, Martín Menem, se opone y pretende darle tres para otorgarle uno más a La Libertad Avanza.
Esa comisión debía dictaminar sobre la validez o invalidez del decreto, pero el viernes pasado venció el plazo legal y por lo tanto, según la interpretación de Unión por la Patria, quedó habilitado el tratamiento de oficio en los recintos, a pesar de que el DNU no figura en el temario de las sesiones extraordinarias.
Cabe recordar que para rechazar un decreto, se necesita el voto negativo de ambas cámaras del Congreso, lo que representa un desafío difícil para el peronismo. Para lograr el objetivo, Unión por la Patria (que tiene 33 senadores sobre los 37 necesarios para el quórum) depende de los demás espacios de la oposición: la UCR, el PRO y bloques federales.
