La Universidad Nacional de Cuyo fue volviendo a las clases presenciales en 2021, aunque algunas unidades académicas habían retornado, en espacios específicos, desde fines de 2020. De igual manera, las clases en las aulas de las facultades no regresarán en su totalidad, sino que se mantendrán las dos modalidades hasta el año que viene.
Hay docentes que critican la falta de compromiso del Rectorado comandado por Daniel Pizzi por haberles dado total autonomía a cada facultad y no haberles brindado apoyo. Otros refutan estos dichos, en medio de un hecho político trascendental el año próximo: las elecciones que consagrarán al sucesor de Pizzi, y en donde ya hay potenciales candidatos.
A partir del 26 de julio, en la Universidad Nacional de Cuyo, se implementó la denominada “presencialidad inteligente” y se aclaró que será cada unidad académica la que convoque “en su ámbito” al personal respectivo para efectuar actividades presenciales.
Odontología y Ciencias Médicas ya habían empezado con prácticas el año pasado y están casi en presencialidad plena. Este año se fueron sumando otras, como el caso de Ciencias Agrarias, y todas las unidades académicas están con un porcentaje de presencialidad.
Javier Ozollo, docente de la facultad de Ciencias Políticas y Sociales apuntó duramente contra la conducción de Daniel Pizzi porque “el Rectorado planteó una presencialidad inteligente, que tiene mucho de caótica, no hubo normativas generales, estudiadas y profundas para volver a la presencialidad”.
“Cada facultad está haciendo lo que puede, lo que le parece, lo que ha generado situaciones muy disimiles con muchos inconvenientes para alumnos, docentes y no docentes. El peso de llevar adelante este proceso, en un 100%, cayó en los docentes, alumnos y no docentes que nos hemos tenido que arreglar como hemos podido. Sin apoyo de la Universidad”, disparó.
También cuestionó a la Dirección de Educación a distancia “que debería estar a la cabeza de toda la problemática de la virtualidad de la pandemia. Y hay mucha gente que sabe una barbaridad, como mi hermana (Fernanda, quien dirige una maestría en el tema) y no se las convoca por cuestiones partidarias, por diferencias de color político”.
“Hay que pensar una estrategia seria y convocar a los que saben. La Universidad tiene, y a patadas, independientemente del color político. Lo que me parece es que ha habido una convocatoria a aquellos que tienen el mismo color partidario, ese es el problema”, disparó.
Desde el Rectorado tienen una visión muy distinta a la del doctor en Ciencias Sociales que, para muchos, se está calzando el traje para suceder a Pizzi. Dolores Lettelier, Secretaria Académica de la UNCuyo, indicó a Los Andes que “venimos trabajando desde el 2018 con la Dirección de Educación a Distancia y se comenzó con una capacitación sostenida en el tiempo para docentes la pandemia, que fue una respuesta a un contexto de emergencia”.
“Lo que estamos trabajando es en recuperar todo lo que transitamos en la pandemia y repensarnos. No hay un modelo establecido aun. La Dirección articuló con las distintas facultades que tienen representantes”, aclaró.
El retorno pleno lo marca la cuestión sanitaria, aunque ha mejorado significativamente. “Si no tenemos más el distanciamiento, claramente se podría volver a la presencialidad plena. Todas las decisiones de la Universidad van en línea con la provincia y las propias reglamentaciones”, sostuvo Lettelier.
A modo de balance, resaltó que “se fueron tomando decisiones con la información que había, seguramente si lo hubiéramos tenido previsto, se hubieran tomado mejores decisiones”. Y con respecto a la metodología para tomar esas decisiones aseveró que “es un ámbito muy plural y heterogéneo, requiere de las miradas de todas las facultades y se realizó en conjunto”. Además, comentó que se están organizando jornadas para estudiar cómo será el año próximo y que también se hará con las distintas miradas.
Las aclaraciones desde Ciencias Políticas
Una de las facultades en donde juega muy fuerte lo partidario es en la facultad de Ciencias Políticas y Sociales, justamente allí hay dos nombres que suenan como potenciales aspirantes a ser la máxima autoridad de la Universidad Nacional de Cuyo: la actual decana Claudia García (cercana a la Franja Morada) y el mismo Ozollo, reconocido militante del peronismo universitario y ex funcionario del gobierno de Celso Jaque.
Es interesante el planteo de Ozollo, cuando hasta hace dos semanas, el peronismo, incluido el que milita en la UNCuyo, sostenía las virtualidad a rajatabla. El resultado de las PASO y los nuevos aires que llegan desde la Casa Rosada, parecen soplar también en el campus universitario.
Mariana Castiglia, Secretaría Académica de la facultad de Ciencias Políticas y Sociales, expresó a Los Andes que “queremos seguir abriendo presencialidad sin soltarle la mano a quienes viven afuera del Gran Mendoza porque la pandemia posibilitó el estudio. Sería muy poco inteligente después de lo transitado soltar las aulas virtuales”.
“Si esta facultad vuelve a la presencialidad pura y los alumnos que no puedan volver cursarán como alumno libre. Pero queremos que no sea como antes de la pandemia, sino que tenga aula virtual y horarios de consulta sincrónicos, eso posibilita seguir estudiando”, agregó.
Con respecto a las inversiones y los recursos que se tuvieron que adquirir para hacer frente a la virtualidad, Ozollo dijo que “la universidad no nos dio nada en la virtualidad, ni un plus por aumento salarial ni a los estudiantes ni a los no docentes” en relación a la compra de licencias de plataformas virtuales con dinero de as matrículas que se cobran en el Posgrado.
Castiglia aseguró que “el Rectorado compró licencias y un montón de cosas, que no alcanzaron y algunas cosas las compramos en la facultad, todos salimos a resolver el problema y en Políticas lo hicimos muy bien Jitsy.meet y con Moodle donde teníamos las aulas virtuales”.