El gobernador Rodolfo Suárez participó hoy en la Fiesta de la Ganadería de las Zonas Áridas, en un evento que si bien tuvo una buena participación política de distintos partidos, fue copado por dirigentes del oficialismo, inclusive con la participación de la presidenta del Pro, Patricia Bullrich.
En su discurso tradicional del almuerzo -pronunciado ante el intendente de General Alvear, Walther Marcolini-, Suárez hizo referencia a la situación económica provincial, el combate de la pandemia del coronavirus en el último año y medio, y también dio varios anuncios de obras que estarán direccionadas no sólo en el sur provincial, sino en materia ganadera y frutihortícola.
No obstante, también anunció que a través de Emesa se ha dado “el primer paso para emprender el anhelado trasvase del río Grande al Atuel”.
“Ustedes habrán visto el llamado público que hicimos a tal efecto días atrás. que apunta a consensuar una metodología para estudiar la factibilidad ambiental, que brinde un marco de objetividad ante el Coirco”, destacó Suárez.
No obstante, aclaró que “no es posible ningún trasvase sin una presa que regule el caudal, por eso tenemos que seguir con Portezuelo del Viento. Justamente esa obra, por su grado de avance, es el camino más corto para consolidar el proyecto del trasvase, que tendrá múltiples funciones y una de esas será mitigar la crisis hídrica”, expresó.
El Gobernador también aprovechó para criticar al gobierno nacional, sobre quien dijo que hay un “trato discriminatorio de la asignación de recursos de la Nación, que lejos de premiar a los que mejor hacen las cosas, nos dejan al fondo. Si nos hubiesen tratado como al promedio de provincias el año pasado, tendríamos que haber tenido unos $16.500 millones de pesos más, que los podríamos haber asignado a infraestructura que tanto necesitamos”, acotó.
