Durante el mediodía de este viernes, el gobernador Rodolfo Suárez estuvo presente en el acto de apertura del Año Judicial, en el que ofreció un discurso al igual que Dalmiro Garay, presidente de la Suprema Corte de Mendoza. Fue en el salón de actos de Tribunales provinciales.
“Hay una gran dificultad originada por una macroeconomía enferma”, fue una de las frases destacadas de Suárez, quien además no dejó pasar las diferencias existentes en el Gobierno nacional, precisamente entre el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
A micrófono abierto, la charla entre Suárez y Garay
“Hay una macroeconomía enferma desde hace mucho tiempo. Por un lado por la pandemia y también por la incertidumbre que trae aparejada la falta de plan y las controversias en el seno mismo del Gobierno nacional”, aseguró el titular de Ejecutivo mendocino.
Para el Gobernador esos desacuerdos han generado “traumas institucionales y bloquean la posibilidad de establecer consensos esenciales que aborden las reformas estructurales y que puedan torcer la historia de ciclos que terminan trayendo más frustración que progreso”.
Ante esas dificultadas, sumadas a la inestabilidad política y económica internacional, Suarez afirmó que “la mejor contribución que puede hacer la administración provincial es enfocarse en la tarea de construir un Estado sano, austero, que brinde algo de certidumbre a la ciudadanía y un gesto de empatía con los que peor la pasan”.
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Como servicio esencial para la ciudadanía y con el fin de profundizar las reformas judiciales realizadas años atrás, Suárez dio instrucciones de “convocar a una Comisión de Reformas Procesales Penales” que esté integrada por representantes de la Suprema Corte de Justicia, del Ministerio Público Fiscal, del Ministerio Público de la Defensa, de la Federación de Colegios de Abogados y ambas Cámaras legislativas.
“Será coordinada por la Subsecretaría de Justicia del Gobierno de Mendoza y tendrá por misión final realizar un informe de base con el que se elaborará un proyecto de ley que enviaré a la Legislatura tan pronto como sea posible”, agregó el Gobernador.
Suarez explicó que la batería de reformas que modificaron el Código Procesal Penal “han consolidado exitosamente el sistema de enjuiciamiento acusatorio adversarial”, pero tras considerar que han quedado diseminadas, cree oportuno “avanzar en la creación de un texto ordenado que compile estas leyes en un único cuerpo normativo para dar orden en favor de la ciudadanía y que facilite el estudio y la aplicación a estudiantes, abogados y magistrados”.
El segundo anuncio del Gobernador que alcanza a la Justicia es la convocatoria de la Comisión de análisis y ajustes del nuevo Código Procesal Civil, que funciona en el ámbito del Poder Ejecutivo. Su fin será elaborar un informe sobre la puesta en vigencia del nuevo Código Procesal Civil “para hacer un diagnóstico y, en caso de que corresponda, ajustar lo que estimen necesario a la normativa para seguir dándole calidad”.
A propósito de la incorporación de la oralidad y la reducción de los tiempos procesales, Suarez destacó que “los resultados han sido extraordinarios, entre los cuales se cuenta la baja sustancial de la duración de los procesos civiles, de más de 5 años a menos de 1 en promedio. Pero luego de haber transcurrido 3 años, he dado instrucciones para que los actores intervinientes en el proceso puedan reunirse y evaluarlo”.