El gobernador Rodolfo Suárez intentó poner paños fríos a la tensión generada dentro del Frente Cambia Mendoza, entre el diputado Omar De Marchi y el radicalismo. A la vez, le bajó el tono al cruce que mantuvo este fin de semana con el senador kirchnerista Lucas Ilardo.
Sobre las críticas que lanzó el líder del PRO contra la UCR y la posibilidad de romper con el frente, el mandatario provincial aseguró que “son cuestiones que siempre ocurren y no hay que darle tanta trascendencia”. Además, afirmó que “permanentemente” dialogan con los integrantes de FCM.
“El 2023 va a ser un año fundamental para la Argentina y todos aquellos que creemos en un modelo de país, tenemos que estar juntos trabajando y dentro de esa unión, hay que dirimir las diferencias de las personas que puedan llevar adelante los proyectos a través de las primarias, como se ha hecho siempre”, afirmó tras recorrer el Laboratorio de Fiscalización de Cannabis en Santa Rosa.
Sin embargo, a pesar de la intención de Suárez, el ambiente está por demás caliente en la coalición gobernante. Casi al mismo tiempo en que decía esas palabras en el Este provincial, el presidente de la UCR, Tadeo García Zalazar, emitió una dura declaración contra De Marchi.
En una entrevista con Radio Nihuil, el intendente de Godoy Cruz fue consultado sí apostaría a que el legislador nacional se va o se queda en frente y él respondió de forma tajante: “Si tuviera 200 dólares, compraría paneles solares. No le pondría un peso a De Marchi”.
El cruce con Ilardo
El fin de semana hubo un intenso cruce entre el gobernador y el jefe del bloque del PJ en el Senado, Lucas Ilardo.
Es que el mandatario provincial minimizó su papel en la Legislatura y le comentó al Diario Uno que no se puede alcanzar acuerdos con él, por representar al kirchnerismo: “Con ese pibe no se puede tener diálogo si es un fanático. Es un sin sentido las cosas que dice”.
Entonces, Ilardo respondió con una “carta abierta de un pibe para el Gobernador de Mendoza” y aseguró que Suárez lo agredió “por impotencia”. Sostuvo que el mandatario “no es un fanático del trabajo” y hasta lo llamó directamente “holgazán”.
Entonces, Suárez hoy reculó y le restó importancia a la polémica: “Hace tiempo viene tildándome de varias cosas. Son cosas que se dicen de la política. Yo trato de verlo del punto de vista de lo mejor para los mendocinos”.
“Siempre tenemos que buscar el diálogo y el consenso para los temas en los cuales hay diferencias. De manera tal que el trabajo que nosotros hacemos, tanto oficialismo como oposición, se traduzca en esto que estamos viendo hoy, que es trabajo y riqueza para la Provincia”, cerró.
