Con la publicación del decreto en el Boletín Oficial, el gobernador Rodolfo Suárez derogó oficialmente en las últimas horas el subsidio que el Gobierno de Mendoza había destinado para la fundación del pastor evangélico Héctor Bonarrico, a quien se le había asignado un subsidio por no menos de 18 millones de pesos a lo largo de dos años.
“El gobernador de la provincia decreta: Artículo 1: Derógase el decreto N°684 de la fecha 9 de mayo de 2022 y en consecuencia déjese sin efecto el convenio aprobado por la citada normal legal. Artículo 2: El presente decreto tendrá vigente desde la fecha de su publicación. Artículo 3: Comuníquese, publíquese, dese al Registro Oficial y archívese”, destaca el escueto decreto 846, con fecha de ayer, jueves 26 de mayo, y con la firma del gobernador y del ministro de Gobierno, Víctor Ibañez.
La decisión fue adoptada este mismo jueves por Suarez, luego de que se conociera la noticia del cuestionado subsidio y se generara una fuerte polémica en torno a la decisión, que cosechó críticas de todos los sectores políticos.
El subsidio cancelado
La partida de 18 millones de pesos que había sido autorizada para que el Gobierno entregara a la fundación de Bonarrico -por medio del ya derogado decreto 684- tenía, entre otros destinos, dotar de fondos a los templos y a los pastores de esta iglesia. Había sido otorgado el 9 de mayo y había sido publicado también ayer, jueves, en el Boletín Oficial.
Bonarrico confirmó que el subsidio iba a recibirlo gracias a un acuerdo al que llegó su partido Masfe (el cual preside) con el Gobierno en las elecciones pasadas. Y es que durante las elecciones generales de 2021, el partido de Bonarrico desistió de participar con candidaturas a cambio de ayuda económica.
“Después de las elecciones, dijeron que la forma de ayudar a este pueblo era creando este vínculo, para no crear una dirección (en el Gobierno) creamos un acuerdo de prestación”, destacó Bonarrico a Los Andes. #Este acuerdo es de 9 millones de pesos por año, cuando la dirección de Género recibe 70 millones de pesos”, comparó el pastor. Y aseguró que “todas las ONG prestan servicios de la misma forma”, además de aclarar que el gasto iba a ser supervisado por el Tribunal de Cuentas, en el que hay dirigentes de la oposición.
Aliado, pero con distancia
El pastor Bonarrico fue senador provincial hasta abril de este año y desde su banca acompañaba los proyectos del Poder Ejecutivo, a pesar de que había accedido a ella por el frente Protectora (al que llegó de la mano de José Luis Ramón).
Fueron las declaraciones de Bonarrico las que generaron molestia en Suarez, quien decidió derogar el decreto y dejar sin efecto el subsidio que era parte este supuesto acuerdo el mismo día en que había sido publicado en el Boletín Oficial (el jueves). En ese sentido, el gobernador desmintió que existiera un acuerdo político con el partido Masfe que se convirtió en dinero. Y si bien dejó claro que no fue él quien firmó la ayuda. De hecho, señaló que el subsidio era “uno más” de los que entrega el Gobierno a distintas instituciones.
Por ejemplo, en los últimos meses, el Gobierno entregó dos a la Sociedad Rural para eventos privados. Uno de ellos fue por 3 millones de pesos.
Qué implicaba el cuestionado subsidio derogado por Suarez
Según la cláusula cuarta de “Compromiso presupuestario” que figura en el anexo del decreto ya derogado, el Gobierno iba a entregar a la fundación de Bonarrico “la suma de $9 millones distribuidos en 4 pagos trimestrales de $2,25 millones, comenzando el primer desembolso a partir de la fecha de aprobación del presente decreto” (el 9 de mayo pasado).
Además, se establecía que el monto del segundo año “no podrá ser bajo ningún aspecto inferior al asignado en el primer año”. Es decir, se entregarían -por lo menos- otros 9 millones de pesos.
El decreto fue rubricado por el vicegobernador Mario Abed y el ministro de Seguridad Raúl Levrino; y también menciona al ministro de Gobierno Víctor Ibáñez como uno de sus artífices. Pero ahora nadie en el gabinete se hace cargo.
Abed afirmó que ha firmado numerosos decretos en ausencia del gobernador, pero aclaró en forma tajante a Los Andes: “Jamás hablé con el pastor de ningún acuerdo y jamás estuve en ninguna reunión con él”.
Sobre este punto, Suárez insistió en que “el convenio por el que se otorga es normal, es un trámite más. Tenemos subsidios a universidades y clubes, hay una parte del presupuesto con el que ayudamos a fundaciones”.
Pero las expresiones de Bonarrico ofuscaron al jefe del Poder Ejecutivo. “Saqué el decreto de la baja”, confirmó Suárez en horas de la mañana de hoy, y aseguró: “No tengo diálogo con Bonarrico, quien no forma parte de la mesa política”.
Eso sí, hasta que dejó la banca, el pastor fue una especie de senador número 22 de Cambia Mendoza. Lo ungieron como vicepresidente segundo de la Cámara Alta y votaba en consonancia con el oficialismo. Aunque el Gobierno hoy minimiza su aporte: dice que el voto de Bonarrico no era tan importante porque CM tenía asegurada la mayoría sin él.
