La aventura merece un capítulo más. Después de transitar un largo periplo, repleto de dudas y certezas, este Independiente Rivadavia de Gabriel Gómez tiene derecho a una final. Y eso se jugará hoy, desde las 16:35, en Junín, frente a Sarmiento, bajo el arbitraje de Fernando Echenique.
La semana fue intensa en Avenida Las Tipas. Un cambio acá, dos o tres consejos allá y múltiples arengas para empujar en el momento en que el cansancio comienza a sentirse. Habrá que luchar con uñas y dientes; pero también habrá que buscarlo. Por eso el cambio: Matías Tissera por Nicolás Quiroga. Un delantero más y la opción de meter a Mauricio Asenjo entre los centrales, en el corazón del área.
Será una propuesta arriesgada, con ataques más directos y menos movimientos laterales. El buen pulso que Sarmiento posee en su mediocampo deberá ser combatido con solo tres hombres.
La obligación será toda azul. La caída (0-1) como local obliga a algo más que ganar por la mínima. Independiente Rivadavia deberá imponerse por dos goles de diferencia para meterse en la final por el segundo ascenso.
No obstante, Sarmiento sabe que nunca se puede festejar con antelación ya que en los cuartos de final le ganó a Brown de Adrogué de visita, por 1 a 0, y perdió de local por el mismo resultado avanzando por "ventaja deportiva".
En el banco de suplentes estarán: Joaquín Mattalía, Rodrigo Colombo, Ignacio Irañeta, Federico Guerra, Lautaro Disanto, Nicolás Quiroga y Cristian Lucero.
Los hinchas de la Lepra despidieron a su equipo el jueves pasado en un concurrido banderazo y el Azul está desde ayer por la mañana en tierras juninenses (se hospeda en el Hotel Colón) y alrededor de las 11:30 comenzó la práctica en el Complejo Italia 90, donde realizaron ejercicios regenerativos para sacarse el viaje de encima y calmar tensiones.
En horas de la tarde, los jugadores salieron a caminar por la coqueta ciudad bonaerense (distante 268 kilómetros de Capital Federal) y posteriormente el cuerpo técnico dispuso de una sesión de análisis de videos del rival de esta tarde.
En Sarmiento el entrenador Iván Delfino hará un cambio con el regreso de Matías Garrido (cumplió con la suspensión) por Leonardo Villaba.
El talentoso enganche, quien se destacó en Patronato y fue factor fundamental en el ascenso del equipo entrerriano, que dirigía en ese entonces el actual técnico de Sarmiento, estará detrás de los dos Nicolás, Orsini y Miracco, tratando de generar juego de mitad de cancha hacia adelante, ubicándose detrás del mediocampista defensivo de la Lepra, Santi Úbeda.
A todo o nada y sin posibilidades de especular; justo como le gusta jugar a Independiente Rivadavia. Y por si fuera poco, nada mejor que un 25 de mayo para gestar otra patriada histórica.