Cuando todo indicaba salir bien para Shakira y su entorno, se revelaron nuevos episodios que vivió junto a su expareja Gerard Piqué y la familia de éste, con quienes la relación terminó destruida y ya nada los une más que los dos hijos.
A comienzos del segundo trimestre de 2022 comenzaron los rumores de las infidelidades que había cometido el entonces jugador de fútbol, que según datos entregados por el paparazzi Jordi Martin, sumaban más de 50 las mujeres con las que había engañado a Shakira.
Recientemente, medios europeos han sacado a la luz que, que a la ya existente mala relación que sostenía la cantante colombiana con Montserrat Bernabéu, madre de Piqué, se sumó un posible enfrentamiento que habría llegado a consumarse a los golpes.
Según revela Laura Fa en su podcast Mamarazzis, mientras Shakira lloraba en el hombro de la que hasta hace unos meses fue su suegra, Bernabéu ayudó a “ocultar la nueva relación”, indicando que le dejó vía libre a Clara Chía.
Esto tendría sentido, teniendo en cuenta las otras fotografías que circularon en redes sociales, en las que se veía a la abuela de Milan y Sasha muy sonriente compartiendo en una playa de España, con su hijo, su marido y su nueva suegra.
Al enterarse, Shakira no dudó en increpar a su exsuegra y todo terminó mal, puesto que la madre de Piqué le habría propinado un fuerte puñetazo en la cara en frente de sus nietos, mientas que el exfutbolista se quedaba con los brazos cruzados.
“Todo se debe a que cuando empezó la relación entre Piqué y Clara Chía se refugiaron en una casa que tienen los padres de Piqué en Cabrils, España”, aseguró Laura Fa en medio de su programa.
Este habría sido también el detonante para Shakira ubicara en uno de sus balcones, la mencionada bruja que apuntaba hacia la casa de los padres de Piqué, teniendo en cuenta todos los posibles malos tratos que recibió de parte de Montserrat Bernabéu.
