Si bien solemos despertar, ir al baño y comenzar nuestra rutina, olvidando por completo el aseo hasta después de terminar con las obligaciones, hay quienes ponen total énfasis en los aromas, haciendo que sus días tengan un plus.
Los expertos sugieren que un buen olor podría ser la clave para dormir profundamente para así lograr que uno sienta al día siguiente que ha descansado muy bien.
Basándonos en esto, surge la pregunta de ¿Cómo hacer para que un dormitorio huela bien? Y por más que lo pensemos, la primera opción es la lavanda, pero no es la única alternativa.
Existen por lo menos tres alternativas a la lavanda para también lograr un descanso reparador y te las detallamos para que comiences hoy mismo a implementarlas.
Apostar por los aceites esenciales de geranio
La inhalación es la forma más rápida de experimentar los beneficios de los aceites esenciales. A medida que inhalamos, las moléculas de esos aceites entran en contacto con nuestros nervios sensoriales, que estimulan el olfato.
Usar Ylang-Ylang
Es un aroma floral ideal para ayudar a promover la relajación y una muy buena alternativa para la lavanda. Es una fragancia de uso común en los perfumes y se ha demostrado científicamente que tiene un efecto calmante para la mente.
Tener bolsas de hierbas
Esta es una manera de lograr una fragancia persistente. En el caso de las bolsitas con lúpulo seco o bálsamo de limón colocadas debajo de las almohadas o alrededor de la habitación, brindan una fragancia suave y natural.
Desde luego, que, a estos o cualquier otro método, hay que sumarle limpieza, sobre todo de comestibles que generen olor al descomponerse, buen ingreso de aire puro y buena iluminación para combatir las bacterias que se generan en los espacios más recónditos de tu habitación.