A diferencia de muchas figuras del espectáculo, Soledad Pastorutti decidió mantener sus raíces y vivir junto a toda su familia en su pueblo natal, Arequito (Santa Fe), desde donde se moviliza seguidamente a Buenos Aires y demás ciudades para cumplir su cargada agenda de compromisos laborales.
La casa de La Sole está ubicada en un predio en las afueras del pueblo, sobre la ruta, tal como ella ha contado en varias ocasiones. Hasta algunas personas de la zona o fanáticos pasan por el frente y tocan bocina como un saludo simbólico para la artista.
Soledad comparte su casa con su esposo Jeremías, con quien está casada desde 2007, y sus dos hijas Antonia (11) y Regina (8). Los cuatro suelen compartir tiernas postales en Instagram y divertidos videos de TikTok.
En ese terreno también viven el padre de La Sole, Omar Pastorutti, y su madre Griselda, quienes fueron cruciales en el descubrimiento musical.
Otra persona que Soledad admira con devoción es su abuela Valeria, otra residente del predio, a quien le ha dedicado la canción “La Valeria”, lanzada meses atrás, y con quien suele cocinar pastas con receta italiana.
En otra casa, la hermana y también cantante Natalia Pastorutti reside con su esposo y sus dos pequeños hijos, Pascual y Salvador.
Si bien cada familia tiene su espacio personal e intimidad, las juntadas son frecuentes, mientras que los más chicos comparten y disfrutan de la naturaleza del lugar.
La vida de La Sole en su casa de Arequito
En una entrevista con la revista Noticias, Soledad Pastorutti contó por qué decidió quedarse en Arequito, pese a recorrer a diario tantos kilómetros para su trabajo como cantante.
“A todos les parece raro y hay quienes no me creen que vivo en Arequito. Viví casi dos años en Buenos Aires en la semana y los fines de semana volvía al pueblo. Como los estudiantes. Nos casamos sin tener nuestra casa terminada y, al principio, vivimos en la casa de mis viejos y la libertad y la vida de pareja la teníamos más en Buenos Aires. Vivir en Arequito no es un impedimento. Son menos de 400 km, casi cuatro horas, y la ruta me gusta, manejo muchas veces aunque desde hace un tiempo mi marido lo hace por mí”, detalló la intérprete de “El bahiano”.
“Tengo aclarar que no somos un clan, somos una familia unida. Elegir vivir en Arequito tiene que ver con eso”, aclaró.
“En el medio comemos todos juntos en un quincho familiar. Lavamos los platos y acomodamos entre todos y cada uno se va a su casa. A la noche también cenamos todos ahí: mi hermana es la que menos va porque le gusta acostarse temprano. En el pueblo tengo una vida tranquila. Mis amigas son las de siempre”, reveló la cantautora.
La Sole también destacó que sus hijas, Antonia y Regina, asisten a la misma escuela pública a la que iba ella de pequeña: “Me tranquiliza conocer a los amigos de mis hijas y sus familias”.
La casa de La Sole en Arequito: ¿un zoológico?
Nati Pastorutti fue entrevistada meses atrás por Jey Mammon en “Los mammones” y describió que tener tantos animales en el predio puede resultar complicado. Como disponen de un patio amplio, la familia tiene perros, cabras, tortugas, caballos, gansos, entre otras criaturas.
“Tenemos una cabra, por ejemplo, vos escuchás llorar que parece un niño y es la cabrita. Aparte la trajeron cuando era chiquita y se cree un perro. Porque estuvo tanto tiempo con tantos perros ¡que hace las cosas que hace un perro!”, comentó entre risas la cantante.
“Hay tortuga, caballos... Una yegua pero después la llevaron al campo porque hacía desastres. Y hay gansos... Me cagan alrededor de mi casa. Yo termino de baldear y viene el ganso a cagarme”, agregó la hermana de Soledad.
En ese sentido, la artista advirtió en tono humorístico: “Es un zoológico mi casa y creo que los animales están en contra mío... Todos los desastres que ocurren ahí adentro lo hacen cerca de mi casa”.