Tener varias botellas de puré de tomate vacías en casa y no saber qué hacer con ellas suele ser un escenario recurrente en la vida de muchas personas. En lugar de tirarlas a la basura, es posible transformarlas en decoración para tu hogar: un florero de vintage para que tu living se vea de manera única y elegante.
Este proyecto no solo es bueno para el medio ambiente, sino también una excelente forma de darle una segunda vida a esas botellas que muchas veces acumulan polvo. Con un sencillo paso a paso, vas a poder realizar este adorno que destacará en tu espacio preferido.
Cómo reciclar las botellas de salsa de tomate para crear una maceta
El primer paso consiste en reunir los materiales necesarios, que incluyen: una botella de puré o salsa de tomate, un maple de huevo vacío, cinta adhesiva para papel, pintura acrílica blanca y flores artificiales o naturales.
- Para empezar, preparás una mezcla de pegamento para papel pintado con agua.
- En un recipiente, colocás agua hasta la mitad y añadís cuatro o cinco cucharadas del adhesivo en polvo, removiendo bien hasta lograr una mezcla homogénea.
- Luego, cortás el maple de huevo en pequeños pedazos y lo hervís en una olla con agua caliente durante algunos minutos hasta que se reduzca su tamaño.
- Después, triturás el cartón hervido hasta obtener una pasta espesa. Esta mezcla la escurrís con la ayuda de una servilleta de tela, presionando con un bol para retirar el exceso de agua y obtener una pasta más seca.
- Una vez que la pasta esté lista, la mezclás con el pegamento diluido que preparaste previamente. Con esta masa, forrás toda la superficie de la botella de puré de tomate, aplicando la técnica de papel maché.
- Después de cubrir toda la botella, alisás su superficie como si estuvieras amasando, asegurándote de que quede lo más prolija posible.
- Dejás secar completamente la botella antes de aplicar una capa de pintura acrílica, utilizando una esponja para dar un acabado suave y uniforme. Podés elegir el color que prefieras para tu florero.
Una vez que la pintura esté seca, solo te queda agregar las flores que más te gusten, ya sean naturales o artificiales. Este proyecto no solo es sencillo y económico, sino que también es una forma creativa de contribuir al medio ambiente mientras decorás tu hogar con un estilo vintage único.