La mermelada es una conserva de frutas que se ha disfrutado por siglos. Su nombre proviene del portugués marmelada, que originalmente se refería a la confitura de membrillo y su elaboración implica cocinar frutas aprovechando la pectina natural.
Aunque se suele asociar con cítricos, se puede encontrar mermeladas de una amplia variedad de frutas, incluyendo combinaciones impensadas.
La mermelada sin cocción es una alternativa deliciosa y saludable a las tradicionales. Esta versión no requiere que prendas el fuego, lo que ayuda a preservar el sabor natural y los nutrientes de la fruta que elijas.
Además, es posible hacerla con una gran variedad de frutas (nosotros te mostramos la de ciruela) y se puede endulzar al gusto con alternativas naturales como miel o stevia.
Lo mejor de todo, es que solo se usan tres ingredientes y la posibilidad de uno opcional. Para la mermelada de ciruela vas a necesitar: 1 bol de ciruelas congeladas (o de la fruta que hayas elegido), 1 cucharada colmada de semillas de chía (preferiblemente molidas) y 50 ml de agua. Además, podes optar por 3 dátiles o 2 cucharadas de pasas de uva para endulzar.
La fácil preparación de la mejor mermelada de ciruela
Para comenzar con la receta de esta mermelada sin cocción, primero hay que moler las semillas de chía y luego las vas a dejar en remojo durante 15 minutos. Luego, debes triturar la fruta congelada en la licuadora y se le puede agregar las semillas de chía que anteriormente habías dejado en agua.
Ahora, solo resta dejarla reposar hasta que adquiera la consistencia deseada. Esta preparación es ideal para ponerle a las tostadas, añadir a yogures o como relleno de postres. Para quienes buscan opciones más saludables, la mermelada sin cocción es una excelente elección.