En una era dominada por la tecnología, en muchos hogares, hay aparatos que permanecen encendidos casi todo el día. Por supuesto, destaca el teléfono móvil para el que siempre existe una excusa para evitar apagarlo. Pero también suelen estar prendidos el televisor o la radio, sin que veces nadie les preste atención.
En el caso de la PC y de la laptop, salvo que haya que realizar actualizaciones o bajar archivos muy pesados, tenerlas siempre encendidas, es algo desaconsejable.
Qué pasa si dejas tu PC o laptop encendida siempre
Algunos de los problemas tienen que ver con el hardware. El funcionamiento permanente del equipo produce calor que, si no se disipa de manera adecuada, puede dañar algunos componentes como el procesador, la tarjeta gráfica y el disco duro. Un sobrecalentamiento prolongado puede reducir significativamente la vida útil de estos elementos.
Cada vez que se enciende y se apaga un dispositivo, sus componentes son sometidos a un ciclo de encendido y apagado. Si bien los equipos modernos están diseñados para resistir muchos ciclos como estos, el uso continuo puede acelerar el desgaste.
Por otra parte, el sobrecalentamiento y el desgaste pueden provocar fallas en el hardware y las fluctuaciones de voltaje pueden dañar componentes sensibles y causar pérdidas de datos.
En cuanto a la seguridad, un equipo encendido y conectado a internet es un blanco fácil para ciberataques. Los delincuentes pueden aprovechar vulnerabilidades en el sistema operativo o en las aplicaciones instaladas para robar información sensible, instalar malware o tomar el control remoto del equipo.
Las fallas de hardware y los ataques cibernéticos pueden provocar la pérdida de datos sensibles almacenados en la PC. Si bien al utilizar la computadora como servidor o realizar tareas de backup, puede ser necesario dejarla encendida, para el uso doméstico existen otras alternativas mucho más eficientes.