Al momento de alquilar un inmueble se suponen muchos riesgos ya que el inquilino puede habitar el lugar de la manera que lo crea conveniente, pero siempre existe la posibilidad de un problema. Algo así ocurrió en Reino Unido cuando los propietarios se sorprendieron al ver el sucio estado en el que un inquilino dejó su departamento.
A través de las redes sociales se hizo viral un posteo de las imagenes que mostraban la cantidad de basura y suciedad que dejó el inquilino de un inmueble cuando se fue del lugar. Los dueños fueron conscientes recién al momento de entrar junto a un limpiador profesional.
El departamento ubicado en Newcastle debía volver a verse decente e higiénico para poder ser alquilado nuevamente, razón por la que los propietarios buscaron incansablemente una empresa capaz de llevar a cabo esa compleja tarea.
Con mucha suerte, el director de la empresa Gold Star Haulage and Removals, Jonny Caisley, aceptó el gran desafío. “El inquilino era un alcohólico que dejó todo arruinado. Recibí una llamada para verlo y pensé ‘esto es malo’”, indicó el hombre.
El trabajador confirmó el servicio de limpieza en el lugar sin saber con qué se encontraría. “Para mí era trabajo y no me podía negar. Otras compañías lo habían rechazado. Cuando llegué, el olor era espantoso. Habían dejado la comida allí por un tiempo, al igual que todo lo demás”, reveló Jonny.
Tal como se ve en las imagenes viralizadas, el piso se encontraba cubierto de botellas vacías de cerveza y ron. Además, gran parte del suelo estaba cubierto por una gruesa capa de polvo, mostrando que hace tiempo no se limpiaba.
En una entrevista con el medio local The Sun, el limpiador comentó:“El piso está en el centro de la ciudad de Newcastle, es un área solicitada y esos pisos cuestan alrededor de 150 mil libras (200 mil dólares aproximadamente). Los vecinos estaban felices de que lo hubiéramos despejado, ya que creo que era un vecino de pesadilla”.
Además de las botellas de alcohol vacías, la cocina se encontraba plagada de hongos debido a las cajas de pizza y restos de comida en el lugar. “Retiramos todo tipo de ropa, llantas, colchones, basura. Todo mi personal estaba trabajando en el trabajo y tomó seis o siete horas hacerlo, y tres cargas de camioneta”, sostuvo Caisley.