Este domingo hubo una nueva gala de expulsión en Gran Hermano en una noche donde las expectativas estuvieron más que altas y tanto participantes como público no se alejaron de la televisión para vivir el minuto a minuto de este durísimo duelo entre los tres nominados.
Thiago, con el 52,9% de los votos, abandonó la casa ante el desconsolado llanto de Daniela, que justamente fue quien lo voto, posibilitando que en su primera nominación dijera adiós.
El concursante oriundo de González Catán le pidió a la casa que lo vote para poder medirse en placa y ver si contaba con el respaldo del afuera. Sin embargo, esto no le alcanzó para permanecer y no pudo obtener menos votos negativos que sus compañeros de placa, Agustín Guardis (47,1%) y Camila Lattanzio.
Camila, la primera salvada de la noche
En una de las primeras incursiones a la casa más famosa del país, Santiago del Moro le comunicó a los concursantes quien era la menos votada de la jornada.
Finalmente Camila salió de placa al obtener el 7,82% de los votos, frente a Agustín y Thiago.
El fuerte relato de Thiago en la cena de los nominados
Durante la cena de nominados de este sábado por la noche, los concursantes tuvieron un encuentro íntimo para charlar sobre su paso en el certamen, su balance y también lo ocurrido a lo largo de su vida, previo a su ingreso a Gran Hermano.
En ese sentido, Thiago reveló una desgarradora historia de su hermana melliza Nélida. “Estuvo de novia, perdió un embarazo de cinco meses con un pibe que era un re loco”, comenzó a narrar el participante, frente a la atenta mirada de sus compañeros de mesa.
“A los tres meses que perdió el embarazo, el pibe le pegó a mi hermana y se separaron”, continuó el chico González Catán y reveló que intercedió en favor de su familiar: “Yo la defendí a ella, fui y le pegué al pibe. No me gusta que le levanten la mano a ninguna de mis hermanas”, sentenció.