Desde que volvió a la casa de Gran Hermano, Daniela cambió un montón. Subida al carro de la venganza, se vistió de villana de telenovela y no paró.
Cuando salió, por voto de la gente, descubrió la traición de Coti y supo, por fin, lo que Thiago decía de ella en conversación con sus amigos en la casa.
Cerca del repechaje, Daniela juró venganza y eso alentó al público para votar por su regreso. La gente quería sangre. El tema es que Daniela entró muy arriba y desde el primer momento sus actitudes tuvieron mucho de pose y nada de genuino.
DANIELA, LA MALDITA VENGADORA
En las redes sociales se multiplican los mensajes contra Daniela y su “venganza” contra Thiago. La joven de las pestañas eternas había jurado que no iba a volver con el participante y ahí está, de arrumaco en arrumaco, pero sin darle un beso siquiera.
Muchos aseguran que su gran jugada maestra es histeriquearlo hasta que no de más. Otros afirman que podría ir por Cone y así vengarse de todos de un solo saque, pero en algo coinciden todos y es que Daniela se convirtió en un monstruo que un poco de vergüenza ajena genera.
JULIETA LA UBICÓ A DANIELA POR THIAGO
Desde el principio Julieta y Dani son amigas, pero las actitudes de la morocha desconciertan a “Disney”. En una charla íntima en el jardín, la encaró y le dijo que no se entiende lo que hace y remarcó: “sos rara”.
Daniela asegura que ella no va a tener más relaciones con Thiago, pero Julieta le dijo que maquillarlo, dormir juntos y ponerle crema en la espalda era casi lo mismo. “No te mientas a vos misma” sentenció la participante en la charla que tuvo mucha lucidez de su parte.
“No te quiero ver chapar” le dijo “Disney” a su amiga con cierto tono amenazante. Daniela dijo que no, pero sabemos que miente y se miente.
