La creatividad gastronómica no tiene límites, y en el competitivo mundo de las hamburguesas, los dueños de locales buscan constantemente maneras de destacar. El creador de contenido Cheddy King, propietario de Gose Smash Burgers en Bilbao, lo hizo a lo grande con una combinación inesperada que dejó a todos hablando: una hamburguesa con ingredientes poco convencionales como Jägermeister, tarta de queso y una barrita de KitKat.
En un vídeo publicado en su cuenta de TikTok, Cheddy King mostró el proceso de creación de su hamburguesa. A una smash burger aparentemente normal, le añadió una rebanada de tarta de queso, varias salsas –incluido lo que parece ser dulce de leche–, frutos secos, una barrita de KitKat y, para rematar, un generoso chorro de licor Jägermeister. Con un mensaje motivador de fondo que invitó a romper las reglas y probar cosas nuevas, el chef presentó su creación: “La Jager Cake. Puede parecer extravagante, pero está deliciosa, hay que atreverse a probar”.
Aunque es probable que este video sea más una estrategia de marketing que una oferta real en el menú, la reacción en redes no se hizo esperar. Muchos usuarios aprovecharon la situación para hacer bromas sobre la insólita combinación. “Ponle un polvorón y una zanahoria también”, comentó un usuario con humor. Otro añadió: “Échale un termalgin y ya tienes un botiquín”, mientras que algunos ironizaron sobre el resultado de consumirla: “45€ y una semana internado”, dijo uno.
Las críticas cómicas continuaron: “Te faltó la purpurina”, comentó otro, y un usuario expresó lo que parecía ser un sueño culinario cumplido: “Es como cuando me preguntaba qué pasa si pongo todo lo que me gusta en un plato”. Incluso, un comentario sugerió seguir explorando nuevas combinaciones: “Mi humilde opinión… ¿qué tal un topping de murciélago flambeado con keroseno?”.
La hamburguesa de Cheddy King, aunque probablemente no sea un plato que se servirá todos los días, logró lo que muchos buscan en el mundo gastronómico: atención y conversación. A veces, no se trata solo del sabor, sino de atreverse a romper moldes y crear experiencias únicas, ya sea en el plato o en la mente del consumidor.