El momento de la merienda es uno de los que más problemas nos trae, sobre todo cuando no hay con que acompañar el mate o el café. Es ahí cuando las recetas fáciles toman protagonismo.
Una de las mejores opciones para zafar del apuro es el pan relleno de jamón y queso, un acompañante que ha cosechado gran popular en los últimos años, ya que su sabor es muy reconfortante y satisfactorio.
A su vez, otra de las características que hacen al pan relleno una excelente opción es que se hace con pocos ingredientes e incluso el resultado final es similar al que se consigue en las panaderías.
Ingredientes del pan relleno:
- 500 gramos de harina común (usar leudante no está mal)
- Media taza de aceite
- 1 cucharada de azúcar.
- 1 cucharada de sal.
- 30 gramos de levadura (no usar si la harina lo incluye o usar poco).
- 1 taza de agua.
- 200 gramos del queso que más quieras (podes usar más de uno).
- 100 gramos de jamón cocido (podes reemplazarlo por otro embutido).
Preparación
- Lo primero que se debe hacer luego de tener todos los ingredientes es calentar agua, sin dejar que hierva.
- Con el agua caliente, se añade el azúcar y la lavadura desmenuzada. Revolver hasta que quede todo bien disuelto y dejar reposar hasta que fermente.
- En una mesada colocar la harina en forma de “corona”, rociarla con sal y hacer un hueco en el medio para incorporar el aceite. Luego de cumplir con estos pasos, sumar la mezcla tibia con la levadura.
- Unificar los ingredientes con movimientos suaves y envolventes desde el centro hacia afuera de manera gradual hasta que obtengas una masa uniforme. Serán cerca de 10 minutos.
- Cubrir la masa con un paño de cocina, bolsa o papel film hasta que se duplique su tamaño.
- Extender la masa con la ayuda de un palo de amasar hasta formar un rectángulo. Espolvorear con un poco de harina y poner las fetas de fiambre y las rebanadas de queso. BONUS TRACK: podes ponerle cualquier otra cosa para más placer
- Enrollar cuidadosamente la masa. Asegurar los extremos con leves presiones.
- Untar con aceite, manteca o la yema de un huevo. Colocar en una bandeja apta para el horno y dejar reposar durante más o menos 10 minutos.
- Hornear durante aproximadamente 40 minutos o hasta que esté bien dorado por fuera y esponjoso por dentro.
- Sacar de cocción y dejar reposar por unos minutos para evitar que el queso se derrame al cortar las porciones del pan.