Los aros de cebolla son una receta ideal para una picada con amigos o para disfrutar de entrada entre varias personas. Aprende a prepararlos con un ingrediente secreto para que queden extra crocantes y sean una explosión de sabor.
Este platillo está entre los acompañamientos más habituales de las comidas rápidas y no es de extrañar porque son irresistibles. En nuestra receta, explicamos cómo conseguir que queden muy crujientes y deliciosos de forma sencilla.
El secreto para conseguir que nuestros aritos queden muy crujientes y no se ablanden es hacer un rebozado triple: primero, pasaremos la cebolla por harina, luego por una mezcla de huevos y leche y luego, por pan rallado. De esta manera, conseguiremos que queden irresistiblemente crujientes, que no se ablanden tras la fritura y que el rebozado se mantenga pegadito.
Los ingredientes necesarios para preparar la receta de aros de cebolla son:
- 2 cebollas grandes.
- 1 taza de harina.
- 1/2 cucharadita de levadura química.
- 1/2 cucharadita de pimentón dulce.
- 1 cucharadita de sal.
- 1 huevo.
- 1 taza de pan rallado.
- 1 taza de pan rallado
- Aceite para freír.
- Ingrediente secreto: 1/2 cucharadita de pimienta negra.
El paso a paso de la receta de aros de cebolla
Primero, hay que pelar las cebollas y cortarlas en rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor. Luego, separar los aros con cuidado para que no se rompan o se desarmen.
En un bowl mezclar la harina, la levadura química, el pimentón, la sal y la pimienta negra. En otro recipiente hay que batir el huevo con la leche. En un tercer bowl, colocar el pan rallado.
Pasar los aros de cebolla por la harina, luego por la mezcla de huevo y leche, y finalmente por el pan rallado. Este paso se debe hacer con cada aro, asegurándose de que estén bien cubiertos por el rebozado para que luego queden bien crocantes.
Una vez hecho esto, hay que calentar el aceite en una sartén profunda a fuego medio-alto y freír por tandas durante 2-3 minutos por cada lado, hasta que estén dorados.
Finalmente, hay que escurrir el exceso de aceite con un papel absorbente y servir los aros de cebolla calientes con tu salsa favorita (o aderezo) para disfrutar.