La tienda Dollar General había tenido en su último tiempo una serie de robos insólitos. Parece que siempre que se descuidaban los empleados, un unicornio de peluche color púrpura desaparecía de los escaparates y tras la escena del crimen se iba tambaleando una colita feliz. Sin que nadie se diera cuenta, un perrito callejero iba a buscar al peluche que consideraba como su mejor amigo
Pero luego de repetidas ocasiones (fueron hasta cinco las veces que volvió a buscar al peluche), la tienda del Kenansville, Carolina del Norte, tomó la resolución de llamar al control de animales. La situación parecía salirse de control y a causa de que Sisu, el ladronzuelo en cuestión, era un enorme perro macho.
Lo que podría haberse convertido en una triste situación al estilo de las películas de Disney, con el perrito encerrado y lejos de su amigo de felpa, un agente del Control de Animales tomó una resolución inesperada. En un acto de compasión y movido por la ternura que le daba la situación, terminó comprándole el unicornio como regalo a Sisu.
Las fotos del reencuentro de Sisu con su juguete preferido
“Esto es lo que sucede cuando entras en el Dollar General constantemente para robar el unicornio púrpura que querías, pero luego llaman a control de animales para que te encierren por tu allanamiento de morada y hurto”, escribió primero el agente en una publicación de Facebook en la que se puede ver a un ahora tranquilo Sisu con su juguete. El final feliz de la historia: “Pero el agente compra tu artículo para ti y lo lleva contigo”.
Todo el departamento quedó encantado con la tierna actitud del perrazo. Pero rápidamente sus publicaciones se hicieron virales, y según contaron los de servicios de animales, un día después el famoso criminal fue adoptado. Obviamente con su unicornio púrpura como acompañante oficial para conocer a su nueva familia.