Este martes por la noche, en La Voz Argentina, Soledad Gilabert, una joven de 24 años oriunda de Neuquén, se destacó en las audiciones a ciegas y reveló que se llama así por la Sole. Se lo contó en vivo a la cantante, sumado a una especial historia con su poncho.
El martes por la noche Soledad Gilabert se presentó en las audiciones a ciegas de La Voz Argentina. La joven de 24 años, oriunda de Rincón de los Sauces, provincia de Neuquén, relató en el backstage cómo nació su amor por la música luego de sufrir una pérdida familiar durante su infancia.
“Somos mi mamá y ocho hermanos. Mi papá falleció cuando yo tenía 4 años y creo que el regalo que me dejó fue la música, para superar su ausencia, porque en mi familia casi nadie canta, no hay músicos”, le contó a Marley antes de ingresar a cantar.
“Me llamo Soledad por La Sole, y aunque no había influencias musicales sonando en mi casa, mi mamá siempre fue fanática de ella”, reveló. Además, contó que, hace dos décadas, Soledad Pastorutti visitó la localidad neuquina, y ese día su madre compró un poncho que guardó todo este tiempo.
“Andamos de aquí para allá con el ponchito, ahora lo trajo también, así que ojalá que se den vuelta”, soñaba Soledad. Ante la consulta de Marley sobre cómo había sido su viaje a Buenos Aires, la joven precisó que publicó una encuesta en su cuenta de Instagram -tiene 25.000 seguidores- si querían que fuera al casting del reality.
“Hicimos una rifa con números, y esa plata fue toda destinada para venir, porque no había otro casting más cerca”, agregó. “Era lo único que me quedaba y así pude llegar, con 20 horas de viaje y otras 10 de espera en la fila”, agregó.
Soledad Gilabert eligió a la Sole y le contó que se llama así por ella
Soledad interpretó una versión de “Fue culpa de los dos”, canción de Rodrigo Tapari, y cuando parecía que nadie la iba a elegir, Ricardo Montaner giró su silla, y Soledad Pastorutti también.
En el instante en el que la Sole apretó el botón, la madre de la participante saltó de alegría y besó aquel poncho que trajo. Luego, llegó el momento que la joven eligiera y fue sin sorpresas, se terminó inclinando por la ídola de su madre.
Además, le contó a la Sole su historia personal. “Me pusieron Soledad por ella, y una vez viniste a Rincón y mi mamá guarda un poncho desde que yo tenía tres años, así que me voy La Sole”, expresó, mientras se abrazaba con la artista, quien se sorprendió.
“¡Qué bueno! ¡Y ahora yo tengo para darte otro poncho!”, bromeó la cantante, y se acercó a saludar a la madre de Gilabert detrás del escenario.
