Benjamín Vicuña se refirió como nunca sobre Blanca, su primera hija fruto de su relación con Pampita, a 10 años de su muerte y estremeció con su relato, según Ciudad Magazine. “Incluso se debe perdonar a Dios”, afirmó conmovido el actor chileno en una entrevista íntima con Cecilia Bolocco.
La reflexión de Benjamín se dio luego de justificar la bronca con la religión apenas falleció Blanquita, producto de una infección sin cura que la consumió en días: “En la primera etapa me dio mucha rabia con la religión. Porque está ese ABC del cristiano de que si sos una persona la vida te tiene que tratar bien”.
Fue allí cuando Benjamín Vicuña lanzó su pensamiento sobre la divinidad, en carne viva por la pérdida de Blanca, su hija mayor: “Hay un pasaje de la Biblia, que lo escuché hace muy poco y me sorprendió porque no lo conocía, que incluso se debe perdonar a Dios. Él es el que perdona, pero uno también tiene que tener el corazón abierto y perdonar los designios”.
Benjamín Vicuña recordó a Blanquita a 10 años de su partida
Ante la consulta que Cecilia Bolocco le hizo sobre Blanquita, Benjamín Vicuña manifestó: “No puedo desconocer que nuestra historia, nuestra Blanca, significó muchas cosas para muchas personas. Entonces, de alguna manera tengo cierta responsabilidad para contestar, porque perfectamente podría decir que de eso no hablo porque para mí es un lugar sagrado”.
Ahí, siguió: “Nunca voy a hablar de detalles, ni de cosas que tengan que ver con intimidades de una familia, y cómo se transitó ese momento. Pero en estos diez años como familia ha sido un viaje de amor, donde la ausencia se transforma en presencia”.
Entre risas de emoción y orgullo, Vicuña reveló: “Mis hijos a veces se ponen celosos porque hay más fotos de Blanca que de ellos en mi casa. Si aprendés a encariñarte con esa figura que te acompaña siempre, como un ángel, una sombra, es una de las razones por las que no le tengo miedo a la muerte, por las que trabajo, por las que me levanto a la mañana. Cuando siento una profunda emoción se la dedico a ella”.
“Cuando me pasó esto me acuerdo que el primer día estaba en shock, y me acordé de Cristián Warnken (N del R: conductor y activista político chileno), pedí que si alguien lo conocía que por favor me lo traiga. Y vino. Lo miré, le di un abrazo y le dije ‘decime que esto se puede. Que este dolor me va a dejar respirar en algún momento’. Hay gente que va a la religión, y yo no era tan religioso”, cerró Benjamín Vicuña sobre Blanquita.