Los participantes de Gran Hermano fueron desafiados una vez más por el dueño de la casa para obtener el 100% del presupuesto semanal para las compras del supermercado. Los jugadores debieron aprenderse a la perfección la coreografía del videoclip de “Con Calma” de Daddy Yankee.
Julieta asumió el rol de coreógrafa, ya que afuera de la casa es profesora de danzas, y ayudó a cada uno de sus compañeros para que se aprendan cada paso que debieron copiar del video, por lo que lo vieron cientos de veces.
Los participantes tuvieron que replicar cada paso de baile que realizan los bailarines de Daddy Yankee en uno de los videos con mayor cantidad de reproducciones del cantante puertorriqueño.
Durante horas, los participantes practicaron frente al espejo del baño y del que está al lado del confesionario. Y, finalmente este jueves tuvieron ensayo general con vestuario y luces, con el que quedaron fascinados al ver la puesta de luces y de humo que la producción manejó desde el control.
El papel de Daddy Yankee lo hizo Marcos, que fue el líder de la semana pasada y por eso Gran Hermano decidió que ese fuera su rol.
Fue en vivo en el debate de este jueves que los jugadores bailaron la coreografía completa para que el supremo decida si superaron o no la prueba, la que los habilita a comprar más comida, pero también chocolates, helados y galletas que les hacen más amenas las horas de ocio adentro de la casa.
Camila entró en crisis en Gran Hermano
El martes pasado fue el cumpleaños de Alfa y Camila quería prepararle un desayuno, pero no pudo. ¿Por qué? Nadie la despertó. Los participantes se habían puesto de acuerdo en levantarse temprano para agasajar a Walter y nadie la tuvo en cuenta.
Es que el vínculo de Camila con Alfa tiene preocupada principalmente a las chicas. Ellas intentaron advertirle al jugador de 61 años sobre el peligro de su relación para el afuera, por cómo se podía ver y la desaprobación del público.
Las formas de Camila molestan en la casa y pocos quieren tenerla cerca. Ella se da cuenta de esto y también es motivo de crisis. Lloró en el confesionario.
“No me gusta cómo me tratan acá adentro. Me hacen sentir mal todo el tiempo, a la mañana, a la tarde, que hablan mal de mí, que me contestan mal”, soltó la rubia con un llanto desconsolado.
“Yo no sé si estoy lista para eso porque sigo pasando lo de mi papá y acá no me siento libre ni para darle un abrazo a nadie”, dijo. “Siento como que me están apagando por completo. La estoy pasando mal y no lo quiero demostrar porque van a decir una cosa u otra”, cerró muy angustiada.