Los trabajadores que tienen por tarea atender al público requieren una dosis especial de paciencia, que se transforma en vital para poder cumplir con la labor y no perder el control ante pedidos extraños.
Sin embargo, quienes atienden las cafeterías Starbucks en Nueva York se muestran extenuados y aseguran que los clientes los tratan como si fueran robots.
Y es que muchas veces, los encargados de armar pedidos tienen que tolerar que tiktokers o instagramers realicen extravagantes pedidos para quedar como simpáticos ante sus seguidores, pero se vuelve en un verdadero quebradero de cabezas para quien está del otro lado del mostrador.
“Estas órdenes nos están volviendo locos porque son tan largas y tan específicas que requieren mucho más trabajo de lo que deberías estar haciendo por una sola bebida”, detalló el encargado de una tienda al portal The Guardian.
Las órdenes son verdaderamente insólitas, tal y como lo relata dicho artículo. Algunas de ellas exigen un café con leche de avellanas y hielo con nata montada y sirope de caramelo.
“Las horas de trabajo que obtenemos no son suficientes para el gran volumen de pedidos que tenemos que producir. Nos están pidiendo demasiado y la mayor parte del tiempo no tengo suficientes personas en la tienda para hacer todas las cosas que Starbucks nos pide que hagamos”, agregó el supervisor.
La situación se hace mucho más compleja cuando se deben armar pedidos para ser entregados a domicilio: “Con el pedido o la entrega por teléfono móvil, no siempre podemos aclarar lo que quieren y la gente se enfada mucho por cosas pequeñas cuando ya he preparado la bebida casi a la perfección. La gente nos trata como robots para hacer café”.